Un un viejo desván donde un veterano periodista guarda cajas de documentación arranca The Keepers, nueva serie de Netflix que sigue la estela de Making a Murderer, hito del true crime, el crimen real. La producción intenta desentrañar la muerte sin resolver de una monja de Baltimore en 1969 y contribuye al florecimiento de un género que sumerge al espectador en investigaciones reales y sin intermediarios. Más cercano para el público español es el asesinato de Asunta, que Antena 3 empezó a documentar esta semana con una exhaustividad que sorprende por la claridad inusual con que hablan casi todos los que tuvieron relación con su resolución. No es un caso olvidado ni presenta más enigmas que la estupefacción ante la naturaleza humana, pero explota en abierto una veta que llega para quedarse.