Los cerebros del pulpo

Manuel Luis Casalderrey
Manuel-Luis Casalderrey RINCÓN ABIERTO

OPINIÓN

14 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Según los resultados de distintas investigaciones, los pulpos recuerdan, manipulan objetos, juegan, etcétera. Las neuronas del sistema nervioso de los pulpos se extienden por sus ocho tentáculos, que procesan información de forma autónoma, como si tuviesen ocho cerebros. El organismo de los pulpos contiene hasta quinientos millones de neuronas. Dos tercios están en las extremidades.

El sistema nervioso de los cefalópodos (pulpos, calamares, sepias) es el más grande de todos los invertebrados. Pulpos (y calamares) poseen lateralidad, lo cual significa que tienen preferencias sobre con qué extremidades agarrar un objeto o con cuál de los dos ojos mirar para buscar comida. Sería equivalente a la existencia de diestros y zurdos.

El aprendizaje, que depende en gran parte del mecanismo de memoria, es uno de los indicadores clásicos para medir la inteligencia. Dos biólogos italianos enseñaron a varios pulpos a escoger una bola de un determinado color mediante calambres (si fallaban) y comida (si acertaban). En un tanque vecino un grupo de pulpos observaban la prueba. Luego acertaron con la bola adecuada en un 86 % de los casos. Los pulpos aprenden a apagar luces lanzando chorros de agua sobre el interruptor.

Está bien aprender cosas sobre los pulpos o sobre otros animales. Pero eso no debe interferir para nada en el disfrute de nuestro exquisito plato de pulpo á feira en buena compañía.