Sacar la gestión del cajón

María Xosé Porteiro
María Xosé Porteiro HABITACIÓN PROPIA

OPINIÓN

02 ene 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

El problema por el que no se subieron hasta ahora las pensiones ni el salario mínimo interprofesional, no era solo ideológico o económico. Era, simplemente, vagancia. El team de Rajoy+13 venía marcado por la lentitud gestora de su capitán, seguidor implacable del laissez faire, laissez passer, que no hay cosa que un cajón bien cerrado no acabe resolviendo. La mayor parte de las veces porque un problema mayor ocupa el espacio dedicado a los temas de actualidad y de controversia política. Otras, porque se dedicaba demasiado tiempo a cajas ocultas que se han hecho evidentes en los tribunales. O eso, o el equipo Sánchez+17 gana por goleada en el balance de gestión del semestre que lleva en el Gobierno. Es verdad que aumentó en cuatro el número de carteras ministeriales pero no lo es menos que el fuerte ritmo inicial no ha decaído y de repente las cuentas cuadran, la economía no se desmorona, Bruselas sonríe y los trabajadores pobres junto con las abuelas viudas, ven que el horizonte se despeja.

Esa ciudadanía que se sentía invisible tiene ahora la confirmación de que, en verdad, lo era. Cómo explicar, si no, que a partir de ya, nuestro salario mínimo interprofesional será casi el mismo que el de Estados Unidos. Suena parecido pero no es igual porque nuestro desempleo es tres veces y medio mayor. Volviendo al mínimo salarial que comienza con el cambio de año, en España se queda a un tercio del de Alemania pero el coste de la vida es mayor allí que aquí. No hace tanto, en abril del año pasado, Bruselas nos señalaba como uno de los países con más altos niveles de desigualdad y pobreza de Europa, con casi un 30 % de la población en riesgo de exclusión. Se decía entonces que no éramos uno de los países más caros, con un coste medio de la vida un 11 % más bajo que el de Alemania, Irlanda o Reino Unido. Eso y la red familiar, además de la realidad de unos servicios públicos en declive pero todavía de amplia llegada y sostén, explica que soportáramos tanta inclemencia sin rompernos.

Pero no es suficiente: el consumo interno tiene que crecer, los salarios tienen que aportar más a la Seguridad Social, es imprescindible terminar con el oximorón de la pobreza en el trabajo, corregir la brecha de género laboral y de pensiones, y cumplir la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible que solo se ve posible si el empleo y la economía se recuperan, se reduce la pobreza, se regresa a un crecimiento sostenido y este es, a la vez, sostenible e inclusivo. Uf. Y después de todo, me pregunto cuántos de ustedes se saben los nombres y titulares de los ministerios, porque yo no. Pero creo que si nos sabemos los de los equipos de fútbol, no será por cuestión de memoria. Tal vez, están trabajando mucho, con tesón y discreción.