Una de los nuestros

Pedro Armas
Pedro Armas A MEDIA VOZ

OPINIÓN

Alejandro Martínez Vélez | EUROPAPRESS

27 oct 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Hace poco moría Ray Liotta, protagonista de Uno de los nuestros de Scorsese. En esa película, basada en hechos reales, los nuestros eran mafiosos, que se protegían y se eliminaban como nadie. En la política española, los nuestros son los militantes de los mismos partidos o los gobernantes de los mismos votantes. En un gobierno de coalición unos son más nuestros que otros. Si uno de los socios de gobierno es a su vez una coalición, dentro de ella habrá unos más nuestros que otros.

A los de ideología más laxa les vale con que los actuales gobernantes sean feministas y ecologistas para considerarles los nuestros, los progresistas en sentido amplio, los progres en sentido coloquial, por contraposición a los carcas. Ser progre hoy en día no implica ser de izquierdas, porque el progre de hoy es, por definición, transversal. El marxista Marcuse supo prever la capacidad del capitalismo para convertir cada revolución antisistema en una moda asumible, pero no pudo anticipar esta tendencia que exhorta a ser progre sin ser de izquierdas. A los de la vieja izquierda incluso se les considera «izquierdópatas», como si sufriesen una patología.

Sin embargo, aun con la conciencia de clase en horas bajas, los nuestros no son los militantes o los votantes, sino los trabajadores. Mientras la inflación y la hipoteca pegan bocados a las economías familiares, los gurús del neoliberalismo cuestionan la revisión de las pensiones con el IPC y advierten sobre los efectos en el empleo de las subidas de los salarios, sea el mínimo interprofesional o el de funcionarios, aunque luego la realidad demuestre lo contrario. Hablan de la guerra, la falta de gas o la factura de la luz y no del margen empresarial, la plusvalía laboral o la nueva pobreza. En este contexto, tenemos una ministra de Trabajo que se posiciona al lado de la clase trabajadora, negociando con la patronal, pero animando la movilización obrera. Poco importa que la frase no sea inclusiva: Yolanda es una de los nuestros.