El padre de Asunta

Ignacio Bermúdez de Castro
Ignacio Bermúdez de Castro PASOS SIN HUELLAS

OPINIÓN

XOÁN A. SOLER

19 sep 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

No me llama la atención la noticia de que el padre de Asunta, Alfonso Basterra, no solicite permisos penitenciarios consistentes en poder abandonar la prisión determinados fines de semana.

Después de la condena que se le impuso por tan execrable crimen, ¿en dónde va a estar mejor que en la cárcel?

Personalmente, si me considerara inocente de un crimen que no he cometido, y ya no digamos matar a un hijo, saldría siempre que la ley me lo posibilitara del presidio para intentar demostrar mi inocencia.

Si fuera culpable no lo haría. Actuaría de forma similar a como lo está haciendo Basterra. ¿Para qué salir? No podría mirar a nadie y todos me mirarían.

Hay delitos y delitos, y ninguno peor se me ocurre que, según la Justicia, el que este hombre cometió.

Los remordimientos le harán insufrible su existencia y mejor estar entre rejas y entre libros que con unos semejantes que nunca alcanzarán a entender su inexplicable proceder.

Dicen que no lo solicita por miedo a que le sea denegado por la junta de tratamiento de su cárcel. Jamás reconoció su delito, el más grave que se puede cometer, y esto provocaría una fuerte alarma social. Los tres motivos más frecuentes para que no se concedan permisos. Pero no creo que esta sea la causa. Cuando se actúa como él, según quedó sentenciado que actuó, no es raro preferir la soledad. Puede ayudarle a pensar por qué mató a su hija.