Condenados por contratar seguros falsos y quedarse con el dinero de los clientes

ourense / la voz

OURENSE

17 sep 2014 . Actualizado a las 21:00 h.

Contrataron dieciocho supuestos seguros, prácticamente todos de coches, sin tramitar la póliza de una manera efectiva, por lo que los clientes estaban en realidad desasistidos. Por ese procedimiento obtuvieron Martha María Rodríguez y Telmo Solla un significativo beneficio económico en detrimento de la empresa Winterthur (Axa, actualmente), que no solo dejó de ingresar el dinero de las pólizas supuestamente tramitadas a su nombre sino que también se hizo cargo de las indemnizaciones correspondientes a dos accidentes. El perjuicio se ha tasado en 82.475 euros.

Los acusados admitieron ayer su proceder y se conformaron con la pena solicitada por la Fiscalía, que únicamente rebajó la cuota de la multa, que mantuvo en nueve meses aunque dejó en cuatro y tres euros, respectivamente, en vez de los seis euros que pedía inicialmente. No llegó a celebrarse el juicio, con la consiguiente agilidad para el desenlace del asunto, sin necesidad de una vista que previsiblemente se prolongaría durante toda la jornada al estar citadas más de veinte personas como testigos de las partes.

Martha María había sido contratada como mediadora de seguros en septiembre del 2004. La relación se rompió dos años después a instancia de la empresa. El acusado, por su parte, también realizaba funciones de mediación en la misma oficina de Axa en la calle del Progreso, 66. Atendía, al mismo tiempo, funciones comerciales y administrativas. Esa situación, «puestos ambos acusados de acuerdo y con ánimo de beneficio ilícito, aprovechándose de la cobertura que les daba representar una compañía aseguradora», les permitió concertar contratos de apariencia legal.

Recibos y credibilidad

Los acusados ingresaban el dinero cobrado, pero no entregaban a la compañía aseguradora. Al abonar la prima anual, los clientes recibían un recibo que los implicados preparaban con el fin de dar una mayor credibilidad a su operativa.

Mediante el mecanismo citado, obtuvieron cantidades que en líneas generales se situaban alrededor de los quinientos euros, aunque también hubo pólizas de 58,26 y 110 euros en la parte más baja, con 754,95 euros como la más cara.

La compañía se hizo cargo del pago de 1.636,80 euros por un accidente y 1.110,23 euros en otro. No asumió la empresa, sin embargo, ni los 300 euros de grúa ni los 3.000 euros de arreglo de un coche que sufrió un accidente a los dos días del supuesto contrato de cobertura realizado por los acusados.