El órgano se constituye con un mes de retraso
24 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.La mesa de negociación del convenio de la pizarra no tendrá finalmente cinco miembros por cada parte (la sindical y la patronal) como se preveía en un principio, ni tres como se llegó a amenazar en la última reunión. Finalmente serán siete, lo que facilitará que puedan estar sentados los tres sindicatos con presencia en el sector, y UGT no tenga que ceder ninguno de los suyos, como no estaba dispuesto a hacer para evitar que CC.OO. y CIG tuviesen que decidir cuál de los dos se quedaba fuera. Así que al final serán siete. Así se decidió ayer, en una reunión donde -con un mes de retraso sobre la fecha inicial- quedó constituida la mesa. Por la parte sindical el reparto quedó en cinco de UGT, uno de Comisiones Obreras y otro más de CIG. Ellos negociarán con otros tantos representantes de la patronal. Lo harán a partir de abril. Para el día 3 está convocada la próxima reunión. Y ya se entrará en harina.
Desde UGT -que al ser el sindicato mayoritario puede firmar en solitario con los empresarios- presentó su propuesta para empezar la negociación. El documento está basado en cuatro puntos, según explicó José Paradelo, responsable de Minería. El primero determina que el nuevo convenio tendrá una vigencia máxima de tres años. El segundo pasa por pedir el mantenimiento del poder adquisitivo de los trabajadores, por lo que se pide un incremento salarial. «Pedimos que se negocie un 1,8% de subida salarial cada ano», explicó el sindicalista. El tercer punto se refiere específicamente a las mujeres en período de lactancia materna. «O permiso é dunha hora, e pedimos que se acumule en días, para pasar a ser 20 ou 21 días. Tal e como está agora, as mulleres non poden ir traballar, porque perden o transporte. É un dereito que teñen por lei, pero se non teñen transporte...», razonaba Paradelo. El cuarto punto se refiere a la aplicación del convenio. En el anterior se acordó que todas las empresas de las provincias de Lugo y Ourense se adherirían al documento, pero desde UGT han constatado que no es así. «Algunhas non están cumprindo», apuntaba Paradelo. De momento las de A Coruña se mantienen fuera.