La tormenta agravó el caos de tráfico en la ciudad y anegó varias calles

m. Rodríguez OURENSE / LA VOZ

OURENSE

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Policía Local y bomberos se vieron desbordados para atender todas las llamadas

30 jun 2018 . Actualizado a las 09:06 h.

Había alerta amarilla por tormentas y la previsión se cumplió. A primera hora de la tarde de ayer, cambió el tiempo y sobre la ciudad descargó una importante tromba de agua que convirtió en un caos la circulación por la capital, ya constreñida estos días por los cortes de calles principales debido a las fiestas, y por ser viernes y comienzo de la operación salida de las vacaciones de verano, con más tráfico del habitual. La Policía Local se vio desbordada para atender todas las llamadas y requerimientos por problemas del tráfico.

La lluvia que cayó intensamente, a partir de las cuatro de la tarde y de nuevo a media tarde, anegó varias calles de la ciudad: Ervedelo, Serra Martiñá, varias en el Couto. Saltaron las tapas de alcantarilla en Emilia Pardo Bazán y hubo problemas en un supermercado de Xan de Novoa y se desprendieron cascotes de algunas fachadas.

El servicio de bomberos también tuvo que acudir a numerosos servicios. Según explicó uno de los mandos ayer, al primera tromba causó un caos y tuvieron que ir a desatascar la glorieta de la N-120, a la altura del puente Novísimo. También acudió el personal de este servicio a realizar achiques en la calle Colón. Sin embargo, matizó, cuando llegaron a algunas de las zonas afectadas, el nivel de complicación había bajado notablemente. Los particulares limpiaron los bajos de los comercios con cepillos. La actividad comercial se vio afectada también por cortes puntuales de suministro eléctrico. Asimismo se suspendieron algunos actos de las fiestas y se vieron afectados puestos de la Feira Medieval. Una de las tiendas perdió toda su mercancía.