La empresa ourensana Natural Cream elabora «mousses» de sabores como tarta de la abuela o de queso, que se venden a distintos restaurantes
20 abr 2022 . Actualizado a las 05:00 h.Federico Vallejo es un emigrante retornado que en Argentina trabajó durante más de veinte años como comercial para distintos bancos. Jose Vázquez es un pastelero de Baños de Molgas que aprendió todo lo que sabe en uno de los templos de la repostería de Barcelona, la confitería Vilaplana. Allí batió, montó y amasó durante dos décadas. Ahora, juntos y desde Ourense acaban de poner en marcha Natural Cream, una empresa en la que elaboran postres para cafeterías, restaurantes y hoteles. Hacen mousses de diferentes sabores que envasan de forma individual en pequeños tarros de cristal. «En Cataluña me especialicé en espumas. Podía llegar a pasarme todo el turno preparándolas y supongo que eso hace que sepa bien cómo elaborarlas», admite Jose. Las suyas tienen el punto perfecto de esponjosidad, cremosidad y sabor. Sobre todo mucho sabor, algo que consiguen utilizando solo ingredientes naturales. «No llevan aditivos, ni conservantes, ni colorantes... Solo utilizamos productos de verdad y de la mejor calidad», explica Federico. Locales como el Orellas, el Tyché o el María Andrea ya tienen en su carta las propuestas de Natural Cream. Trabajan además con el Hotel Barceló. «Hacemos cáterin, pero también nos adaptamos a eventos de particulares. Es posible contactarnos a través de nuestro Instagram y nos amoldamos a lo que nos pidan», afirma Federico.
Tienen siete postres diferentes. El de espuma de avellanas con chocolate, tipo Ferrero Rocher; el de galletas y chocolate al 70 %, tipo Oreo; el de mousse de chocolate; el de higos; el de mango con fruta de la pasión; el de pastel de queso con fresas; y el de tarta de la abuela. «Cada vez que se me ocurre una idea, la anoto, y ahora tengo más de treinta recetas que podríamos hacer. Estamos trabajando para añadir el de crema catalana y el de turrón», comenta Jose. Llegan al local congelados y así aguantan seis meses. Hay que tomarlos fríos, de la nevera. En ese estado deben consumirse antes de que pasen quince días. Con Natural Cream lo fácil es destapar y disfrutar.