Facenda reduce los impuestos por comprar una casa en 895 parroquias

Miguel Ascón Belver
miguel ascón OURENSE

BARBADÁS

santi m. amil

Un programa piloto trata de vencer la desconfianza de los dueños con el alquiler

24 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Comprar una vivienda será mucho más barato a partir de ahora. Una de las medidas previstas por la Xunta en el conocido como «programa de impostos cero no rural» es la eliminación de los tributos de transmisiones patrimoniales y actos jurídicos documentados para menores de 36 años, familias numerosas y personas con discapacidad. Este incentivo se aplicará en la práctica totalidad del territorio ourensano, exceptuando las zonas más pobladas, que se presuponen más dinámicas en la compraventa de viviendas.

Para determinar en qué lugares entrará en vigor esta medida, se ha tomado como referencia un informe del Instituto Galego de Estatística que clasifica a las parroquias gallegas según su grado de urbanización y siguiendo criterios de organismos internacionales como Eurostat. Las calificadas como Zonas Densamente Poboadas (ZPP) son las beneficiadas. Son 895, la mayoría. Solo se quedan fuera las Zonas Intermedias (ZIP) y Zonas Densamente Poboadas (ZDP), que son tan solo 22 parroquias. En el caso de la Ourense, además del casco urbano están excluidas las viviendas de Montealegre, Vista Fermosa, Cudeiro, Rairo y Seixalbo. En Barbadás ocurre lo mismo con la capitalidad municipal y con A Valenzá y Piñor. En O Barco de Valdeorras se quedan fuera su núcleo principal y los de O Castro y Viloira al igual que en O Carballiño con las parroquias de Arcos, Mesego y Ponte Veiga y en Verín con las de Ábedes, Pazos y A Rasela. En el caso de Xinzo de Limia y San Cibrao das Viñas únicamente quedan excluidas de estos beneficios sus respectivas capitalidades municipales.

Un programa piloto trata de vencer la desconfianza de los dueños con el alquiler

«Nos pobos moitas veces a xente pola desconfianza non arrenda. Por exemplo, na Veiga hoxe existen moitas dificultades para que a xente poida vivir porque non hai vivendas baleiras para poder arrendar». Así exponía ayer el alcalde veigués, Juan Anta, el problema que su municipio y otros del medio rural tienen para atraer nueva población. La solución, según dijo, puede pasar por establecer un proceso tutelado por el Ayuntamiento para vencer esas reticencias. Ese es el espíritu de la experiencia piloto que la Diputación financiará tanto en A Veiga como en Oímbra.

La iniciativa partió de los alcaldes de ambos municipios, que además forman parte del gobierno provincial. La institución presidida por José Manuel Baltar aportará 100.000 euros a cada Concello, que (además de poner otros 10.000 euros) será el encargado de gestionar el programa, que incluye incentivos tanto para los propietarios de las viviendas como para los inquilinos. Además de vencer la desconfianza de los primeros, los inmuebles pueden no estar en condiciones y el Ayuntamiento les asesorará para saber qué obras deben realizar antes de poder alquilarlas. El coste de las licencias para ejecutarlas estará bonificado. Además, para los arrendatarios habrá ayudas variables que podrán ser hasta del 90 % del coste del alquiler durante los primeros seis meses en función del número de miembros que tenga la unidad familiar. Se busca, de este modo, luchar contra el envejecimiento del rural. El presidente de la Diputación, José Manuel Baltar, mostró su deseo de que este proyecto piloto funcione y dijo que, si es así, la institución aportará más dinero y lo ofrecerá a otros ayuntamientos.