Los montañeros portugueses accidentados en el Xurés ni tenían seguro ni estaban federados

m. rodríguez OURENSE / LA VOZ

LOBIOS

La Federación lusa de montañismo se cuestiona si actuaron con imprudencia o carecían de formación

28 may 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Los montañeros portugueses que fueron a la Serra do Xurés, en Lobios, para practicar barranquismo no solo no habían pedido autorización al parque natural para realizar esta actividad sino que tampoco estaban federados ni tenían seguro. En Portugal, la Federaçao de Campismo e Montanhismo, en un comunicado, se pregunta si el grupo incurrió en imprudencia o actuó con ignorancia, sin tener los conocimientos necesarios para el descenso de la Corga da Fecha, un cañón que requiere mucha técnica.

La Guardia Civil de Ourense ha abierto una investigación sobre el accidente mortal sufrido por Andre T. S. L., de 38 años, a partir de la cual se elaborará un atestado que se remitirá al juzgado. En la autopsia se observó que el deportista pudo morir de hipotermia o ahogado. Se había intentado quitar el arnés al caer en la grieta en la que finalmente moriría. El funeral será hoy en São João da Madeira, la localidad del distrito de Aveiro del que era natural el barranquista muerto, según informa Jornal de Notícias.

En Portugal, dudan que la expedición que llegó al Xurés el sábado tuviese la preparación necesaria para descender el barranco del Fecha. Las condiciones del caudal del río desaconsejaban la práctica. Antonio Martins, que tiene una empresa del sector, apunta que este grupo no era conocido entre los cañonistas portugueses. «Fue difícil descubrir quienes eran, no tienen mucho que ver con el barranquismo, quizás hicieron cuatro o cinco descensos antes. Conozco bien ese río y tiene un descenso difícil. Cometieron un error técnico provocado por la poca experiencia», considera Martins. Él buscó referencias por Internet y apunta que uno de los participantes en el descenso del Xurés, Americo A., estaba en un descenso hace un año en el Gerês portugués, en el río Cabril, en el que pereció un joven de 33 años que también era de São João da Madeira.

La Federación portuguesa señala en su comunicado que «por lo visto, desconocían las más elementales reglas de seguridad (...) teniendo en cuenta las condiciones objetivas en que se encontraba el caudal del río». Una situación similar a la del accidente en el río Cabril, recuerdan.

El rescate del cadáver, además de la dificultad, supuso un importante coste económico, pero ni la Guardia Civil ni el GES de Lobios o la AXEGA pasarán factura. La Consellería do Mar estudiará el caso para ver si es aplicable el decreto de salvamentos.