Los vecinos del rural de Maceda saludan la presencia de Protección Civil en un operativo de vigilancia antirrobos
26 ene 2017 . Actualizado a las 10:27 h.Las noticias en los medios de comunicación de numerosos robos en el medio rural, con personas mayores como víctimas, asustan. Pero los vecinos de las aldeas cada vez más despobladas de la provincia de Ourense saben lo que pasa y no solo por la tele y los periódicos. «Entraron na casa do Buratiño, en Maceda mismo», decía ayer Elena Fernández, vecina de Xinzo da Costa, aldea macedana donde ayer los voluntarios de Protección Civil iniciaron un operativo que les llevó a recorrer todos los pueblos para informar a los vecinos que ante cualquier problema comuniquen con el teléfono de emergencia 112. En Xinzo da Costa, el pasado lunes, robaron cuarenta cerdos de una granja a la entrada del pueblo. «Eu estou temblando», dice Elena, que se volvió a vivir al pueblo para cuidar de su madre, ya mayor.
Pocos vecinos quedan ya aquí, un pueblo que en su día tuvo 93 residentes. Hoy apenas cinco casas están habitadas y la mayoría por gente mayor. Los vecinos saludan la presencia de los voluntarios de Protección Civil. Seis comenzaron ayer a recorrer los pueblos del rural, llevando una cuartilla con el teléfono 112 y explicando que ante cualquier problema o sospecha avisen. Pinto, Milín, María, Juan y Antonio, junto con el jefe de la agrupación, José Manuel Gil, se organizaron en dos equipos para esta primera jornada. El operativo seguirá en los próximos días, siempre que se puedan juntar equipos de al menos dos voluntarios. «Nós só informamos e se vemos algo raro chamamos á Policía Local ou á Garda Civil. Nós non somos quen de parar a ninguén», explica Gil.
El operativo puede ser disuasorio para los delincuentes «ou non», reconoce el jefe de la agrupación. Pero los vecinos lo agradecen. «Estou encantada. Eu invítovos a café e despois, gardia. Non nos deixedes perecer», les dice Carmen González, también en Xinzo da Costa. Lamenta que alguien se llevó al perro mastín que le cuida un cobertizo y que el can apareció desorientado dos días después. «Onte a noite algo se moveu, pero díxenlle ao meu marido que non se levantara», afirma. En Vilardecás, María Mercedes Copo, lo ve así: «Quen ten medo é a xente maior. Non está mal que pasen de vez en cando».
A Bola organizó patrullas nocturnas hace cuatro años
Maceda no es el primer concello que prueba operativos de vigilancia ante los robos. En A Bola, en el 2013, la alcaldesa Teresa Barge organizó patrullas nocturnas de empleados municipales que recorrían los pueblos de noche. Había habido una oleada de hurtos en las casas y los mayores se sentían inseguros. «A xente agradeceuno», recuerda Barge. La Guardia Civil detuvo a sospechosos.