Amigos do Camiño por Valdeorras destacó el trabajo de su expresidente, Ramón García, y de Teo Suárez, encargado de pinchar las flechas amarillas en la comarca
08 may 2016 . Actualizado a las 05:00 h.«Un peregrino de corazón que nos levou da man polo camiño das estrelas, polo Camiño de Inverno». Ese es Ramón García, Moncho Ragar, un vecino de A Rúa que durante años presidió la asociación Amigos do Camiño de Inverno por Valdeorras y que desde ayer da nombre a un mojón instalado frente a la iglesia ruesa de Fontei. Es una pieza de pizarra -la piedra más representativa de la comarca- con una flecha amarilla indicando el camino a seguir y con la característica concha del peregrino.
García fue ayer el protagonista en una jornada que venía a celebrar la aprobación de la Lei do Patrimonio de Galicia, que abre la puerta para que la ruta sea oficialmente reconocida. Así lo resaltó la regidora ruesa, María González Albert (también estaban los alcaldes de O Barco y Vilamartín, Alfredo García y Rique Barreiro). «A aprobación da nova Lei de Patrimonio é un paso adiante importantísimo despois de moitos anos de traballo, pero non é unha meta. É un punto de partida para un longo camiño para a delimitación, sinalización e declaración de BIC», resaltó González Albert, que destacó el gran trabajo realizado por Ramón García a lo largo de los años «por un recoñecemento do Camiño de Inverno que non chegaba». Ya sí. Y también a él, por haber sido uno de los que más peleó para conseguirlo.
El protagonista -visiblemente emocionado- quiso hacer del acto un reconocimiento coral. «Isto non foi un traballo meu, senón dun gran equipo que estivo sempre ao meu lado, a quen lle dedico este gran homenaxe», destacó.
En el acto también hubo un reconocimiento a Teodoro Suárez, un hombre que «dedicouse durante bastante tempo a pintar as frechas amarelas», tal y como le definió Asunción Arias, la actual presidenta de la Asociación de Amigos do Camiño. Suárez no pudo asistir, por lo que fue otra de las socias de la entidad la que se encargó de recoger la estatua que Xelo de Tremiñá creó especialmente para el evento, un peregrino con una flecha amarilla.
También hubo tiempo para destacar el papel de Asunción Arias. Fue de boca de la presentadora del acto, Sonia Rodríguez, que resaltó su «labor encomiable» en la promoción de la ruta.