La provincia de Ourense tiene los mejores datos de toda España tras la puesta en marcha del carné por puntos en 2006
23 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.En 2006 un total de 49 personas fallecieron en accidentes de tráfico en las carreteras ourensanas. Fue el mismo año en el que se puso en marcha el carné por puntos, que supone la pérdida de puntos por infracciones graves -como grandes excesos de velocidad o conducir bajo los efectos del alcohol-; uno de los pilares de las medidas para tratar de reducir esa cifra. Y sea por ese factor (que también, aunque desde la Dirección General de Tráfico aluden a que son varios más) o por otros, lo cierto es que en 2016 la cifra bajó a 11; lo que sitúa a Ourense como la provincia en la que más han descendido los fallecidos por accidentes de tráfico en España. El porcentaje es de un 77,6 %. Todavía sería mayor si se tuviese en cuenta el balance de 2015, que señala que siete fueron los fallecidos en las carreteras de la provincia.
Los datos forman parte del estudio realizado por Formaster, la asociación profesional de empresas formadoras en logística, transporte y seguridad vial. Y lo corrobora el jefe provincial de la DGT, David Llorente. «Sabíamos que los datos eran buenos, pero no habíamos mirado si eran los mejores», decía. Pero acto seguido reconocía que no se conforma. «Hay margen de mejora», apuntaba. El objetivo es llegar a las cero víctimas en accidentes de tráfico. «Es difícil, pero ojalá se pueda llegar a cero», señalaba. Decía que es cuestión de ir haciendo camino. «Cuando me decían hace diez años que podíamos bajar la cifra a diez víctimas, me parecía increíble, y se ha conseguido. Es cuestión de trabajar en ese sentido, y de tener un poco de suerte», añadía.
Centros de recuperación
¿La bajada de víctimas mortales es debido al carné por puntos? «Entre otras cosas, sí, pero no solo; hubo algún otro cambio más», respondía Llorente. Lo que sí reconocía es que cada vez los conductores pierden menos puntos. Si en el año 2010 se quitaron 42.000 en la provincia; el año pasado fueron 20.700. «Y siempre es una curva descendente -contaba-. Además, los comportamientos más graves que restan puntos, cada vez son menos».
En el caso de perder puntos por una infracción al volante, el conductor puede recuperarlos de dos maneras: dejando pasar tiempo sin infringir las normas de tráfico o realizando un curso en uno de los tres centros autorizados en la provincia (en autoescuelas de Ourense, O Barco de Valdeorras y Verín). «Esa parte reeducativa funciona bien», señalaba Llorente.
403 accidentes con heridos
Desde Formaster resaltaban los buenos resultados de Ourense en cuanto a la reducción de víctimas mortales, pero no así el dato de accidentes de tráfico con heridos. «No han bajado al mismo ritmo», apuntaban desde la asociación, señalando que el año pasado se produjeron en la provincia 403 siniestros en los que al menos una persona necesitó asistencia médica. Las zonas donde más accidentes con víctimas se producen son las vías urbanas (calles y travesías), donde ocurren el 49 % de los siniestros. Un 44 % ocurren en vías convencionales, y un 5 % en autovías y autopistas. Con estos datos, desde Formaster concluyen: «Las medidas de seguridad, tanto activas como pasivas, que incorporan los vehículos han contribuido a la reducción de fallecidos, pero no en la percepción del riesgo, que hace que a mayor seguridad que percibe el conductor, mayores riesgos asume y esto conlleva más accidentes».
Dos ejercicios sin puntos negros
Un punto negro es aquel tramo de no más de cien metros de longitud de una carretera -da igual el tipo de vía- en el que se produzcan al menos tres accidentes de tráfico en un mismo año en los que hubiese heridos o víctimas mortales. Y la provincia suma dos años sin tener ningún punto negro. «Que surja un punto negro un año es hasta normal, el tema es si se repite», explicaba el jefe provincial de la Dirección General de Tráfico, David Llorente. «Entonces es para pedir responsabilidades y tomar medidas», añadía. ¿Cómo se detecta un punto negro? La propia aplicación que maneja la DGT hace saltar un aviso cuando los datos sobre siniestros así marcan que hay una zona complicada. Entonces se hace un informe de la situación y se establece comunicación con el titular de la carretera -Concello, Diputación, Xunta o Estado- para diseñar las medidas oportunas que lleven a acabar con esa situación.
Para encontrar el último punto negro de la provincia hay que remontarse a 2014. En aquel año se detectó uno en el Concello de Pereiro de Aguiar, en la carretera OU-508. En el kilómetro 4, en la curva anterior a la urbanización A Tapada de Bouzas, se produjeron tres accidentes con otros tantos heridos leves. La situación se revirtió mejorando la señalización horizontal y vertical de la carretera.
Sin embargo, el último informe europeo de EuroRAP -en el que colabora el Real Automóvil Club de España (RACE), señala un tramo de la N-120 como el segundo de mayor riesgo de accidente de circulación de España. Está entre Seguín, en Ferreira de Pantón, y Penalba, en Nogueira de Ramuín.