Los feriantes aparcan de nuevo en el barrio barquense de Calabagueiros en Santa Rita

María Cobas Vázquez
MARÍA COBAS O BARCO / LA VOZ

O BARCO DE VALDEORRAS

Las caravanas aparcadas a ambos lados de la calle que va paralela al Malecón apenas dejan paso a los coches
Las caravanas aparcadas a ambos lados de la calle que va paralela al Malecón apenas dejan paso a los coches LOLITA VÁZQUEZ

La finca a la que iban a trasladarse se anegó la semana pasada

18 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Los vecinos del barrio barquense de Calabagueiros deberán convivir unas fiestas más con las caravanas de los feriantes. Después de meses de protestas y el compromiso del gobierno de O Barco de que los vehículos se aparcarían en otra zona (en una finca del otro lado del arroyo), finalmente ven cómo están aparcando y ocupando de nuevo las calles. «Non sabemos que pasa, pero é que ademais este ano hai mogollón de barracas, un número esaxerado; e as caravanas xa o están abarrotando todo», apuntaba el presidente de la asociación vecinal, Lolo Gómez.

Evidenciaba Gómez la sorpresa y el malestar de los vecinos al ver que un año más tendrán que sufrir varios días con las calles abarrotadas y sin espacio para poder aparcar. De hecho, la calle que discurre paralela al Malecón está prácticamente intransitable. Las caravanas aparcadas a ambos lados dejan apenas un estrecho carril por el que pasar. «Chamáronme varios veciños para preguntarme que está pasando, pero non sei nada; quedamos en esperar a que pasen as festas para ir falar co alcalde, porque non sabemos quen manda... Esta mesma mañá [por ayer] vin xente cortando unha rúa ao tráfico que non era da Policía Local», decía Gómez.

Por su parte, el alcalde, Alfredo García, explicaba que la fuerte tromba de agua que cayó la semana pasada echó por tierra los planes de sacar las autocaravanas del barrio de Calabagueiros. «Tuvimos que dejar de trabajar en la finca y eso nos hizo perder un par de días», explicaba García, que después ahondaba en que además el agua provocó desperfectos en el solar donde se prevé ubicar las viviendas con ruedas. «Se reblandeció en exceso y no podían entrar las caravanas», decía.

Reconocía el regidor también que ahora será difícil trasladar al solar a aquellas que ya están instaladas, pero avanzaba que será la última vez que puedan aparcar en las calles del barrio. «Yo les mandaré un escrito a todas diciendo que es un camino sin retorno», avanzó. Aseguró que los problemas que surjan ahora en las Santa Rita serán corregidos para que en las Festas do Cristo estén ya todas en la otra zona. «Entonces ya no habrá discusión», señaló.