El gobierno apura los trámites para acabar con la precariedad de la ORA

Rubén Nóvoa Pérez
rubén nóvoa OURENSE / LA VOZ

OURENSE CIUDAD

Miguel Villar

El contrato con una empresa que pertenece al grupo Vendex caducó hace dos meses

24 nov 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Si hay una concesión municipal que ha estado en el foco mediático durante los últimos años esa ha sido la del aparcamiento regulado (ORA) y la de la grúa. Durante la última década estuvo en manos de Doal, una empresa del grupo Vendex. Situada en el eje de la operación Pokémon, que provocó la caída del exalcalde de Ourense, Francisco Rodríguez, la concesionaria apareció de lleno en el sumario por la supuesta retirada en bloque de multas.

La relación formal entre el Concello de Ourense y la empresa que gestiona la ORA finalizó hace un par de meses. En septiembre se acababa un contrato que supuso un desembolso económico de 1,4 millones de euros al año en ambos conceptos. El gobierno de Ourense apura en las últimas semanas los trámites para acabar con la precariedad en esta concesión municipal. Según explicó el concejal de Seguridade Cidadá, Carlos Campos, el pliego de condiciones de la nueva adjudicación está «a punto de terminarse». En concreto, se encuentra en manos de la asesoría jurídica, en un paso previo, antes de que llegue a la mesa de contratación que será la encargada de tutelar el concurso público para su concesión.

El hecho de que esté en precario no supone ninguna merma en los servicios para los usuarios que cada día utilizan la zona azul ni tampoco para el funcionamiento de la grúa municipal. Si tiene consecuencias, sin embargo, para la administración local toda vez que las facturas que sigue generando el grupo Doal son vistas con reparo por el interventor municipal. La postura del gobierno del PP es, en este caso, similar a la del anterior y pasa por anteponer un servicio que se considera de interés público a la postura de la Intervención. Carlos Campos, que acaba de tomar las riendas de Seguridade Cidadá tras la apresurada salida del gobierno de Isabel Castelo, reconoce que apenas ha tenido intervención en la elaboración de las nuevas bases que regularán la concesión de la ORA y de la grúa. «Este contrato lo cogí casi en la mesa de contratación y fue elaborado por la concejala anterior -en referencia a Flora Moure-». Una de las primeras dudas que tuvo que solventar el actual gobierno fue la de si apostar por separar ambos servicios, tal y como se estudió en su momento. Finalmente, la decisión ha sido la de mantenerlos unidos para que estén en manos de la misma empresa. También habrá que ver si la nueva etapa supone un incremento en el número de plazas de aparcamiento regulado o si tiene en cuenta la petición de los comerciantes de la plaza de Abastos para crear una ORA exprés en las inmediaciones del mercado ourensano.

El gran reto de la nueva concesionaria será que deje de ser un servicio deficitario para las arcas municipales.

1,4 millones de €

Canon anual

El Concello abona 1,4 millones de euros al año a Doal para la gestión de ambos servicios

900 plazas

Repartidas en veinte calles

La calle con más plazas es la avenida de Buenos Aires (151).

90 €

La sanción máxima

Dejar el coche sin tique supone una multa de 90 euros. Son 60 euros por superar el tiempo.

El nuevo pliego de los semáforos prevé sustituir los bolardos por cámaras

Al igual que sucede con la concesión de la grúa y de la ORA, el servicio de regulación semafórica de Ourense se encuentra en precario. El concejal de Seguridade Cidadá, Carlos Campos, sostiene que se trabaja a marchas forzadas para acabar con esta situación y trasladarlo al servicio de contratación lo antes posible. El nuevo pliego de condiciones incluirá una modificación sustancias, en lo que se refiere al control de acceso de los vehículos al casco histórico. La intención del gobierno ourensano, atendiendo de este modo a la reivindicación de Democracia Ourensana, es acabar con los polémicos bolardos del casco viejo. Serán sustituidos, según explicó el concejal Carlos Campos, por unas cámaras que llevarán incorporado un programa que permitirá detectar las matrículas de todos los vehículos para comprobar los que cuentan con permiso para su circulación por la zona monumental y cuáles no. Se trata de un modelo que ya se ha implantado en otras ciudades y que es considerado menos agresivo que el de los bolardos.

La preocupación del grupo municipal de Ourense en Común

La precariedad en que se encuentran muchas de las concesiones municipales es vista con preocupación por el grupo de Ourense en Común. Su concejala Ledicia Piñeiro pidió explicaciones al gobierno en una reciente junta de área sobre la situación en que se encontraban los nuevos contratos de la ORA y de la grúa, de los semáforos y del autobús urbano. «Temos unha lista grande de servizos en precario», lamentó la edila.