La Policía Local es un polvorín

Rubén Nóvoa Pérez
rubén nóvoa OURENSE / LA VOZ

OURENSE CIUDAD

MIGUEL VILLAR

La decisión de colocar más patrullas durante el día en la calle ha levantado viejas rencillas y deja al descubierto las diferencias de criterio entre los propios agentes

09 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Bajan revueltas las aguas en el seno de la Policía Local de Ourense. En las últimas semanas se han hecho visibles las diferencias de una parte de la plantilla con la jefatura y con el gobierno de Ourense por la modificación del cuadrante de turnos. Pero eso parece tan solo la punta del iceberg. La protesta inicial por esta modificación ha desembocado en denuncias públicas de supuestas coacciones a agentes díscolos con los mandos, recursos administrativos ante la convocatoria de nuevas plazas realizadas por propios policías, críticas desde la alcaldía al comportamiento de alguna central sindical y hasta anónimos remitidos a los medios de comunicación para censurar el comportamiento del sindicato más crítico con la gestión de la jefatura.

Rebobinemos. En el año 2014, los sindicatos llegaron a un acuerdo en una mesa de negociación para poner en marcha el denominado cuadrante africano. Se hizo, según fuentes del propio cuerpo, a sabiendas de que incumplía el Estatuto de los Trabajadores y el convenio regulador del Concello de Ourense. Su funcionamiento potenciaba la presencia de los agentes por la noche y, según los críticos con su implantación, favoreció el trato discriminatorio entre unos y otros agentes. Ya en este mandato, una moción plenaria de Democracia Ourensana salió adelante por unanimidad para eliminar este modelo de turnos y para que los agentes patrullasen más por el día. Esa reestructuración entró en vigor a principios de esta semana y se traduce en un incremento de las patrullas por el día y una reducción por la noche. El sindicato SPPME salió en tromba contar la medida y sacó a una quincena de agentes a la calle para protestar ya en varias ocasiones: «Neste novo cuadrante non se fixan criterios para a selección dos distintos postos, tampouco se establece un sistema rotatorio que garante a igualdade entre os policías, polo que unha vez máis quedamos a expensas da arbitrariedade, discriminación e escurantismo que nos ten afeita a xefatura». Según ha podido constatar La Voz no se trata de una postura unánime entre todos los agentes. Otras centrales sindicales reconocen que es un cuadrante mejorable, pero que es un buen punto de partida. Un anónimo enviado a la redacción de La Voz apuntaba a indignación de un «importante número de policías» que entendía que las movilizaciones se debían a que «se les saca o reduce el chupete del cobro de la nocturnidad y las innumerables horas laborales que venían cobrando sin hacerse». En el mismo escrito se elogiaba la jefa del cuerpo por la modificación del «cuadrante caribeño».