Insistencia ante las reticencias a cruzar bien en la capital

Maite Rodríguez Vázquez
maite rodríguez OURENSE / LA VOZ

OURENSE CIUDAD

Santi M. Amil

Voluntarios informan a peatones y conductores de los riesgos si no usan o tapan los pasos

20 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Un peatón cruza la avenida de As Caldas a la carrera, por donde mejor le cae, sin buscar un paso peatonal, atreviéndose en un aparente intervalo sin coches. Un voluntario de Stop Accidentes, asociación que ayer inició una campaña informativa a pie de calle para prevenir atropellos, intenta echarle mano, sin éxito. Él mismo, Dani Pousada, tendrá mayor eco entre una conductora que ha dejado su coche aparcado delante de un paso peatonal. Atiende sus explicaciones cuando le dice que con el coche ahí, un peatón o una mamá con un carricoche tendrá que ponerse calzada adentro para ver y ser vista. La conductora le da la razón y las gracias. Fue alguna de las escenas que ayer vieron en el barrio de A Ponte los doce voluntarios del Concello de Ourense y de Stop Accidentes que participan en esta iniciativa.

El cruzar mal sigue estando muy extendido pero los voluntarios también vieron casos de conductores que iban más pendientes del móvil que de la calle. Nuno Troitiño, uno de los voluntarios, explica que no todos los peatones reaccionaron bien: «En As Caldas estábamos nosotros con dos policías locales y gente de Protección Civil y casi hubo dos atropellos. Tuve que parar yo a un conductor que creo que iba mirando el móvil. Los peatones cruzan sin mirar. La culpa es de todos. Es un poco de impotencia. Se ven situaciones límite».

A otra joven, que iba con un niño y un perro, le tuvo que recomendar diciendo «sois importantes los tres» que recorriera unos metros más para cruzar por el paso de cebra. Este joven es voluntario de Protección Civil y se sumó a la campaña después de conocer que se ponía en marcha la iniciativa.

Ayer por la mañana recorrieron las calles de A Ponte desde la estación del tren, donde ya hubo un atropello mortal, hasta la avenida das Caldas. «Vimos mucha gente cruzando mal, pero reciben bien la información, aunque algunos te dicen que llevan prisa», afirma otro de los voluntarios. Por la tarde acudieron a la calle Nosa Señora da Saínza- escenario de dos casos mortales, el último hace un mes- y a Peña Trevinca.

Dani Pousada, uno de los colaboradores de Stop Accidentes, considera que la campaña tiene que ser intensiva y persistente para conseguir resultados. Cree que saliendo una vez a la semana a los distintos barrios ourensanos, la gente acabaría por concienciarse, pero también estima que para ello es clave el apoyo institucional y que la Policía Local pueda tener más medios y más plantilla y que se apueste por un modelo de ciudad parecido a Pontevedra. Por lo visto ayer, el sesenta por ciento de los peatones cruzaban correctamente, por los pasos y esperando por los semáforos en verde, pero otro cuarenta por ciento lo hacía mal.