Josefa, una de las vecinas atrapadas por el incendio de un piso en Ourense: «Foi horrible, pensaba que non podería contalo»

Aunque no hubo que lamentar daños personales, las huellas del incendio que en la noche del sábado afectó a un piso de un edificio de la calle Vila Real de Ourense, son más que visibles. A primera hora de este domingo seguía precintado el tercer piso, donde se iniciaron las llamas, a la espera de que se investiguen las causas del fuego. Por el momento todo apunta a un cortocircuito en un enchufe que estaba detrás de un armario. El color negro inunda las escaleras. Los vecinos, a excepción de los de la vivienda que acabó en llamas, pudieron regresar a sus casas.

Los residentes en este inmueble del barrio de O Couto lograron salir a tiempo, pero el intenso humo dejó a varias personas, sobre todo a las de los pisos superiores, atrapadas dentro de sus viviendas, con las ventanas abiertas. Fue el caso de Josefa Alonso, que este domingo, ya recuperada del susto, recordaba las dos horas de angustia que vivió sola en su casa.

«Estaba vendo a televisión e sentín un olor a fume, pero non tiña nada na cociña. Entón levanteime e fun ver se era da luz, e nada. Decidín abrir a porta da calle e xa tiña alí todo o fume. Horrible. Enseguida chamei ó meu fillo», explica. «O que eu pasei aí dentro... Houbo un momento no que non sabía por onde entraba o fume. O instinto foi coller unha toalla mollada e deixala abaixo da porta, pero nin así valeu. Abrín a ventana do salón e xa vin a todos os bombeiros. E alí permanecín ata que todo acabou», relata.

Fueron horas, afirma, de mucho miedo, ya que el humo era intenso y ella sufre de asma: «Estiven esperando máis de dúas horas, asomada á fiestra. Logo estiven toda a noite limpando a casa, porque estaba chea de cinzas, todo negro que se metía en todas partes. Menos mal que tiña o teléfono na mesa do comedor, as pastillas e un inhalador, xa que teño asma. Foi horrible, pensaba que non podería contalo... Un susto moi grande. Subía todo o lume de abaixo. Estaba no foco do problema», subraya. El hijo de Josefa, que esta mañana la acompañaba, afirma que su madre se asustó aún más cuando vio a tantos medios de emergencias a través de la ventana. «Pero así mellor, podemos contalo. Hoxe non pasaremos a Noiteboa na casa dela, como tiñamos pensado, pero non pasa nada», añade. 

El resto de los vecinos intentaban este domingo poner todo en orden. Lo de los pisos superiores limpiaban los restos de ceniza y los de abajo se afanaban en retirar el agua después de la actuación de los servicios de emergencias. «Os bomberos foron marabillosos, tentaron calmarme todo o tempo e que a espera fose mellor», subraya Josefa.

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