La obra exterior de la plaza de abastos de Ourense avanza sin resolverse el traslado de los placeros

Rubén Nóvoa Pérez
rubén nóvoa OURENSE / LA VOZ

OURENSE CIUDAD

Las obras para urbanizar el entorno de la plaza de Abastos de Ourense están en marcha
Las obras para urbanizar el entorno de la plaza de Abastos de Ourense están en marcha Santi M. Amil

El proyecto, con una inversión de 700.000 euros, incluye pérgolas y cinco pavimentos

02 mar 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Las máquinas y los obreros llevan días trabajando a destajo alrededor del edificio de la plaza de Abastos número 1 de Ourense. Se trata de la ejecución de la obra exterior de un inmueble histórico que todavía tiene sin resolver lo más importante: el traslado de los placeros. Las negociaciones entre el Concello de Ourense y la asociación de comerciantes del recinto llevan tiempo encalladas. «Antes de hacer la obra de fuera creo que les sería mejor sentarse con los placeros», señala el presidente del colectivo, Emilio González.

En el interior del edificio los trabajos están finalizados, pero el resultado ha sido un edificio diáfano que tiene por resolver el reparto de los puestos y solucionar algunas de las deficiencias de las que alertan los comerciantes. Con todas estas cuestiones por resolver, el plan para reabrir el recinto se encuentra aplazado sin fecha. Entre las peticiones que realizan los placeros se incluye una pasarela para conectar el mercado con la rúa do Progreso y cuestiones relacionadas con la integración del párking en el complejo, la accesibilidad o la carga y descarga.

A la espera de que se resuelvan las diferencias entre el gobierno local y los comerciantes, se ejecutan los trabajos en el exterior. La obra es un modificado al proyecto original con un presupuesto de 726.540 euros. Los trabajos se limitan al entorno cercano, que es la zona que estaba vallada más próxima al edificio y se consideran esenciales para garantizar el acceso y seguridad en un terreno con grandes desniveles. Para ello se ha optado por diseñar un entorno sin un solo escalón para garantizar el movimiento de personas con movilidad reducida y para los que acudan con los carros de la compra. Para lograr ese objetivo se organizarán plazas de distintos tamaños, a diferentes cotas, y todas conectadas con un desnivel inferior al 6 %. El proyecto también incluye la instalación de una serie de pérgolas enlazadas que darán sombra a la zona exterior, donde existirá la posibilidad de instalar puestos de venta exterior. Se trata de una medida fundamental en una ciudad en la que durante los meses de verano se alcanzan con frecuencia temperaturas próximas a los 40 grados. La memoria del proyecto detalla que serán metálicos ligeros, con una altura mínima de 3,60 metros. «Se van combinando en dirección y altura para formar un espacio continuo, diverso y atractivo a la estancia», señala la memoria.

Plantas trepadoras

En lo que se refiere al pavimento, el proyecto que se ejecuta en estos momentos en el entorno más próximo de la plaza incluye cinco tipos de materiales diferentes. Los espacios verdes se acondicionarán con tierra vegetal y plantas trepadoras en la zona del puente murallón, que podrían llegar a formar un jardín vertical. En lo que se refiere a la piedra existente, se aprovechará para pavimentar los tramos horizontales entre las escaleras existentes en la fachada norte. A ambos lados de la escalera principal del edificio, se dispondrá adoquín de pequeño formato. En la zona sur del espacio se utilizará también adoquín para dibujar unos pasos principales.

El hormigón pulido será el material utilizado en su mayor parte de la superficie a pavimentar. Según figura en el proyecto, contará con un acabado pulido para reducir el riesgo de resbalar. Por último, se utilizará piedra nueva en diversos formatos. «Es importante la combinación de colores de los diferentes materiales», resumen en el proyecto.

La actuación proyectada por el Concello de Ourense se completa con diferentes instalaciones de saneamiento, fontanería, electricidad y alumbrado.

Placeros valoran una reclamación por el retraso: «Queremos irnos ya para abajo»

Los placeros del edificio número 1 de Ourense se mudaron en el año 2018 para un edificio provisional situado en la Alameda de Ourense. La previsión era que estarían durante año y medio, pero la realidad es que van camino de los seis años sin que de momento haya una hoja de ruta clara para su regreso, a pesar de que las obras del interior del edificio ya están acabadas. El presidente de la asociación de comerciantes, Emilio González, es claro al fijar la posición del colectivo: «Tendemos la mano para llegar a acuerdos, porque queremos irnos ya para abajo. Firmamos por 18 meses y aquí seguimos. Estamos estudiando hacer una reclamación porque entendemos que puede haber retrasos en un proyecto de este tipo, pero ya llevamos aquí más de cinco años».

El presidente de los placeros niega que los comerciantes sean los que no tienen interés en regresar al nuevo edificio: «Es muy fácil salir y decir que los placeros nos estamos haciendo ricos en la Alameda, pero la realidad es que están cerrando puestos y que nosotros lo que queremos es irnos».

La instalación provisional ubicada en el pasillo central de la Alameda se concibió con una edificación provisional y los placeros temen que su deterioro les obligue a nuevas inversiones, a mayores de las ya realizadas.