La hospitalización a domicilio cuidó de 1.100 pacientes el pasado año

Fina Ulloa
fina ulloa OURENSE / LA VOZ

VERÍN

MIGUEL VILLAR

Siete vehículos renovarán la flota en la que se mueven los profesionales del servicio

11 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El servicio de hospitalización a domicilio (HADO) del área sanitaria ourensana marca desde su puesta en marcha, en 1998, una curva de actividad en constante crecimiento. Cada vez son más los ourensanos que optan por este modelo de asistencia que lleva la atención y los cuidados de los profesionales sanitarios a su propio hogar en lugar de prolongar su convalecencia dentro del hospital, una vez que han solventado la fase aguda de la patología que les llevó a ingresar.

Este servicio está pensado para evitar largos períodos de ingreso a pacientes crónicos con buena evolución, o incluso a quienes han pasado por un proceso quirúrgico, facilitándoles que puedan completar la recuperación en un entorno más cómodo, conocido e incluso más saludable. La desorientación en el caso de personas mayores, o la exposición a otros contagios son dos riesgos que se minimizan con esta fórmula que, sin embargo, mantiene al paciente con el rango oficial de «ingresado». De hecho, según explican desde la gerencia sanitaria ourensana, la persona puede ser devuelta al hospital si se observa alguna descompensación o problema en la evolución de su enfermedad. «A unidade ten por obxectivo o mantemento dos coidados hospitalarios naqueles pacientes que, si ben xa poden ser dados de alta no hospital, aínda precisan coidados médicos e de enfermería especializados e que sirvan de ponte entre a atención especializada e a primaria», explican desde el servicio que dirige Ildefonso Cejudo.

Además del paciente, que recibe la visita de los profesionales médicos y de enfermería en su casa para realizar tanto las técnicas de atención sanitaria que precise como el seguimiento de su patología, el servicio busca también facilitar la tarea de sus cuidadores directos. Por un lado se les evita tener que trasladarse al centro hospitalario para visitar y acompañar al enfermo durante el tiempo que necesitaría para completar allí su convalecencia; y por otro, tienen la tranquilidad de que el seguimiento de esa recuperación en el hogar está en manos profesionales. Eso sí, tal y como insiste su responsable, no se trata de una «derivación» obligatoria sino de un derecho asistencial al que el paciente puede optar siempre que existan varios condicionantes. El primero es que el facultativo que lleva su caso considere que es susceptible de continuar esa recuperación en el domicilio. El segundo es que exista acuerdo con sus cuidadores familiares directos. En tercer lugar se tiene también en cuenta que el domicilio disponga de las condiciones adecuadas para que el paciente pase allí esa etapa de convalecencia.

La estancia media de los pacientes bajo supervisión de los profesionales de esta unidad fue de 7,5 días el pasado año. Durante 2016 el servicio atendió a 1.100 ourensanos dentro de una área geográfica con 170.000 ourensanos. El equipo que llevó a cabo la tarea está integrado por catorce personas: un coordinador, una supervisora de enfermería, cinco médicos y siete enfermeras que se mueven por buena parte del territorio provincial.

Precisamente ayer el servicio incorporó siete nuevos vehículos que les ayudarán a ser más efectivos y a hacer su trabajo de forma más cómoda ya que están dotados con equipamientos que facilitan su manejo e incorporan avances tecnológicos de los que no disponían en la flota actual; la mayor parte de ella con más de una década de rodaje a sus espaldas. Los vehículos viejos no se desechan, según aseguraba ayer Ildefonso Cejudo «porque podemos echar mano de ellos en momentos en los que haya una demanda puntual mayor», señalaba el responsable de la unidad.

Urgencias y Medicina Interna tienen los mayores porcentajes de derivaciones

Los ourensanos atendidos por la unidad de hospitalización a domicilio pueden proceder de casi cualquier especialidad, aunque las estadísticas fijan las áreas de Urgencias y de Medicina Interna como las dos que más utilizan esta fórmula para completar la recuperación de sus usuarios. En concreto, el 34 % de los atendidos en el último año proceden del primero de los servicios y un 10 % del segundo. El envejecimiento de la población ourensana, que aglutina a un alto porcentaje de enfermos crónicos y pluripatológicos que a lo largo del año pueden sufrir varios episodios de agudización que les llevan a esos dos servicios explica esta realidad. El servicio de Neurología es otro de los que utiliza la hospitalización a domicilio, y alcanza el 5 % del total de personas atendidas durante el 2016 por el equipo móvil. También desde Cirugía General o Vascular, Nefrología, Oncología y Neumología tienen pacientes con este sistema. Pero además de la derivación entre servicios internos, la unidad atiende también a pacientes de residencias sociosanitarias.

Aunque el área dependiente del CHUO fue la primera en poner a disposición de los vecinos de su zona de influencia este servicio, en mayo del 2015 también comenzó a funcionar en los dependientes del Hospital Comarcal Valdeorras. En una primera fase se centró en los residentes en O Barco y A Rúa pero en enero del pasado año se decidía su ampliación paulatina al resto de la comarca, así como a las de Trives y Viana. También en el área de influencia del Hospital de Verín se anunciaba recientemente la potenciación de este servicio.