Un explosivo casero hizo volar por los aires el coche abandonado en una glorieta de Verín
VERÍN
El turismo fue transferido hace unos días, cuando ya estaba abandonado en la villa del Támega, a una mujer que no tiene permiso de conducir
11 abr 2024 . Actualizado a las 17:32 h.Todavía son muchas las incógnitas que rodean a la explosión de un coche que tuvo lugar en la madrugada del miércoles en Verín. Tras haber estado en el lugar de los hechos los artificieros de la Guardia Civil y recoger vestigios que ahora están siendo analizados, los agentes del equipo de Policía Judicial tratan de aclarar quien colocó los explosivos en el vehículo y los motivos por los que lo hizo.
A día de hoy todas las hipótesis están abiertas, sin descartarse que lo ocurrido hubiera podido ser una maniobra para ocultar algún delito en el que se utilizó el coche dañado. Cuando fue objeto del sabotaje, el turismo ya no tenía los asientos traseros, lo que hace sospechar que ya había sido objeto de otros asaltos previos.
Lo que sí se sabe es que para volarlo por los aires se utilizó un explosivo de fabricación casera cuya composición se está ahora analizando por parte de los expertos.
El automóvil, un Citroën C2 de color rojo y con placas de matrícula española, llevaba dos semanas estacionado en la glorieta de Queizás de la carretera N-532, que une la localidad de Verín con la frontera portuguesa. Se sabe que el turismo era propiedad de un particular residente en la provincia de Pontevedra, que hace unos días lo transfirió a nombre de una mujer. Curiosamente, la nueva propietaria del vehículo no tiene permiso de conducir, según se ha comprobado.
Los artificieros, en la zona
La deflagración tuvo lugar a primera hora de la madrugada del miércoles y fueron muchos los residentes de la zona que la escucharon, alertando de inmediato a la Guardia Civil. Los agentes acudieron poco después al lugar de los hechos, acordonando la zona y cortando un carril de la N-532 para evitar riesgos a otros conductores. A media mañana los expertos del equipo de desactivación de explosivos de la Guardia Civil, con sede en Pontevedra, se desplazaron hasta Verín para investigar la deflagración y recoger muestras en el coche.