El fiscal quiere inhabilitar al alcalde de Vilariño de Conso y que vaya a la cárcel por 29 contrataciones

La Voz OURENSE / LA VOZ

VILARIÑO DE CONSO

MIGUEL VILLAR

La causa por prevaricación y falsedad quedó vista y pendiente de sentencia por la Audiencia

26 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El fiscal no modificó ni una coma de su escrito de acusación contra el alcalde de Vilariño de Conso, Ventura Sierra. Elegido en las listas del PP, abandonó la militancia con la apertura de juicio oral. Su futuro inmediato depende de la Audiencia Provincial, después de dos sesiones de vista, en la que él defendió un proceder que consideraba honrado, contratando personal en la medida en que disponía de fondos para ello, con el criterio confesado de beneficiar a sus vecinos.

Y si el miércoles parte de los testigos de la acusación declararon que los habían contratado sin haber pasado por entrevista alguna, quienes acudieron ayer propuestos por la defensa del regidor afirmaron que sí habían pasado ese trámite antes de que le concedieran los puestos a los que optaban. En total, son veintinueve los casos, correspondientes a los años 2012 y 2013, sobre los que el ministerio público sustenta su acusación.

El hecho de que la secretaria hubiera advertido expresamente al alcalde sobre la presunta irregularidad de su proceder al contratar sin convocatoria abierta, lo cual dio lugar a distintas notas de reparo, es algo que la fiscalía considera relevante.

El fiscal, que pidió de la sala que deduzca testimonio al entender que dos testigos faltaron a la verdad para proteger al acusado, mantiene su petición de nueve años de inhabilitación por prevaricación y cinco de cárcel por falsedad, al entender que en los trámites de los informes sobre desempleados se hicieron anotaciones incorrectas.

La defensa mantiene su propuesta de libre absolución. Aportó el letrado la norma publicada en el DOG de mayo del 2013 que regulaba los contratos de cooperación. Cree el defensor que el acusado podía suponer, de forma razonable, que al firmar los decretos en los que levantaba los reparos de la secretaria quedaba solventado el problema.

También razona la defensa que al recibir desde el servicio de empleo de Viana de Bolo los nombres de varias personas para optar a los puestos que el regidor quería cubrir, para lo cual tramita la correspondiente petición, de alguna forma ya se hacía un proceso de selección.