El Concello quiere adecentar el último foco chabolista urbano

Serxio Barral Álvarez
serxio barral PONTEVEDRA

PONTEVEDRA

CAPOTILLO

La rehabilitación del Ponte do Couto afectará al asentamiento próximo

18 abr 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

En la madrugada del pasado miércoles, un incendio en el poblado chabolista de O Vao puso de manifiesto el peligro que puede suponer el estado de abandono de este tipo de asentamientos. De hecho, ayer los bomberos del parque de Ribadumia tuvieron que volver a la zona del siniestro ante el riesgo de que el fuego se pudiese reavivar por la gran cantidad de residuos que se acumulan.

Pontevedra no es ajena a este fenómeno, ya que en el límite del casco urbano ?en la calle Otero Pedrayo, frente al albergue de Peregrinos? todavía subsiste un pequeño poblado en el que la chatarra comparte espacio con varias infraviviendas. Recientemente se supo que el Concello proyecta un adecentamiento de todo el entorno que, presumiblemente, afectaría también a este asentamiento.

Fue el concejal de Patrimonio Histórico, Luis Bará (BNG), el que hace unas semanas anunció que aprovechando el proyecto de desdoblamiento de la avenida de Vigo, «vaise afrontar neste ano unha actuación que é bastante complexa pero que busca ir dando pasos para resolver a situación da ponte do Couto, unha das pontes históricas da cidade». La idea es acometer un proyecto de «limpeza e mellora en xeral de todo o contorno, coa finalidade facer accesible a zona». ¿Implicaría esta actuación la desaparición del asentamiento chabolista?, se le preguntó al concejal. «Cando menos, é un primeiro paso para intentar reverter a situación de abandono que hai nesta zona da cidade, aínda que sabemos que a actuación será complexa polo problema de chabolismo que hai nas inmediacións da ponte do Couto», apuntó Bará.

El concejal nacionalista, en cualquier caso, señaló que la actuación directa sobre el asentamiento excede a sus competencias, y que para ello debería de actuar la Xunta de Galicia. El proyecto que impulsa su departamento se ceñirá a la conservación, limpieza y mejora del entorno del puente. «A intención de futuro é facilitar a continuidade da senda peonil do Gafos por esa zona, e aí si estaría afectado directamente o poboado».

No es la primera vez que este asentamiento chabolista está en el punto de mira. Hace apenas dos años, la asociación Vaipolorío reclamó su reubicación. Los ecologistas sostenían entonces que la chatarra acumulada junto al río genera tanto un impacto ambiental como paisajístico. A mayores, advertían de que la chatarra acumulada, las chabolas y «vehículos habitados, xunto con cans atados que chegan ata o propio río», conllevan una ocupación de un camino de servidumbre, impidiendo el paso.

La reclamación de Vaipolorío, que no era la primera que hacía el colectivo sobre este asunto, cayó en saco roto.