Desarticulada una organización que surtía de heroína a todo el mercado gallego

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA

PONTEVEDRA

Guardia Civil

En Vigo, la Guardia Civil desmanteló un laboratorio para el procesado de la droga

02 feb 2017 . Actualizado a las 19:01 h.

En el marco de la operación Galeaza, la Guardia Civil ha detenido a veintinueve personas de distintas localidades de las provincias de Madrid, Pontevedra y Ourense que presumiblemente conformaban una organización dedicada al tráfico de heroína procedente de los Balcanes, Turquía y Holanda y que operaba a nivel internacional. Desde el instituto armado precisaron que siete arrestos se practicaron en Poio, tres en Ourense capital, dos en Trasmiras, otros cinco en Vigo, y uno en Salvaterra, A Lama, A Cañiza y Vilanova. En cuanto a las nacionalidades, además de gallegos, el entramado estaba conformado por turcos y albaneses

En este operativo, en el que participó el ECO Galicia, con sede en la Comandancia de Pontevedra, se practicaron 18 registros interviniéndose «16 kilogramos de heroína de gran pureza, sustancias de corte, útiles para la adulteración,  manipulación y envasado del estupefaciente, prensa hidráulica, moldes». Igualmente, se intervinieron 35.000 euros en efectivo, una pistola con munición, once vehículos de alta gama dotados algunos de ellos de dobles fondos para el traslado de la droga, material electrónico de comunicaciones, documentación relacionada con los hechos investigados.

Según precisaron desde la Guardia Civil, las investigaciones se iniciaron cuando se tuvo conocimiento de la existencia en Pontevedra de una organización que podría estar abasteciendo de heroína a toda la comarca gallega. Las pesquisas y seguimientos determinaron que «se proveían de la heroína a través de tres organizaciones turco-albanesa, asentadas en Madrid y Ourense, encargadas a su vez de la introducción en España de grandes cantidades de heroína procedente de los Balcanes, Turquía y Holanda». 

En Vigo, los agentes localizaron un laboratorio donde los narcos gallegos ocultaban, adulteraban y envasaban el estupefaciente antes de ser distribuido. Entre los detenidos se encuentra un narcotraficante turco, que estaba huido de la Justicia tras ser condenado a catorce años de prisión y un cirujano madrileño que ocultaba en su chalet de Madrid parte de la droga introducida en nuestro país.