El comedor que tira del colegio

Cristina Barral Diéguez
cristina barral CALDAS / LA VOZ

PONTEVEDRA

CAPOTILLO

El servicio que estrenó hace dos meses el CPI Alfonso VII de Caldas de Reis se deja sentir en un incremento del número de matrículas para el próximo curso escolar

29 mar 2017 . Actualizado a las 05:25 h.

El comedor del colegio público integrado (CPI) Alfonso VII de Caldas de Reis ayuda a conciliar a las familias que hacen uso de la instalación. Pero este servicio que el centro estrenó el pasado 16 de enero gracias al empeño de la Asociación de Nais e Pais de Alumnos (ANPA) Celenis está teniendo también un efecto positivo para el centro educativo: un incremento de la matrícula en las distintas etapas educativas (infantil, primaria y secundaria) con vistas al curso 2017/2018.

Lo confirmó ayer la directora del colegio, Pilar Señoráns. «En infantil de 3 años estamos a tope para el próximo curso y en secundaria también aumentó la matrícula», señala la responsable del centro. Y eso, subraya Señoráns, que todavía hay estudiantes que desconocen el servicio. El equipo directivo valora especialmente la marcha del comedor, que arrancó con 15 niños y que en la actualidad tiene casi 25 diarios. «No se puede olvidar que este comedor, como empezó con el curso ya iniciado, no tiene gratificación por parte de la Consellería de Educación. Aunque la conciliación de horarios es importante, el servicio tiene un coste y hay familias que no están en situación de poder afrontarlo», expone la directora del Alfonso VII.

La ANPA está esperando a que salga la orden de la Xunta para solicitar esa subvención que permitiría a la asociación rebajar un poco el precio actual del menú del comedor. No obstante, el colectivo que preside Luis García no perdió el tiempo. «Para el curso que viene contamos con más alumnos y ya se pidió mobiliario nuevo para poder darles un servicio adecuado», apunta. La ANPA valora como positiva la respuesta de las familias teniendo en cuenta la desventaja que supone que el comedor empezara con el curso ya avanzado. «La acogida está siendo buena, depende del día, pero tenemos entre 22 y 25 usuarios diarios. Nuestra idea es potenciar el servicio y si logramos la subvención de la Xunta el comedor podrá ser un poco más económico», remacha Luis García.

En 4º de infantil (3 años) el Alfonso VII tiene una línea cubierta (25 alumnos) para el próximo curso. El colegio público de Caldas recibe a los niños de las unitarias de las parroquias del municipio, que tienen preferencia. «En secundaria la previsión que tenemos es de una segunda línea (30 alumnos) en todos los cursos menos en 4º de la ESO», adelanta la directora. En todo caso, tanto equipo directivo como asociación de padres coinciden en que todavía hace falta un trabajo de difusión del comedor. «Un padre me decía el otro día que no sabía que había este servicio», puso como ejemplo Pilar Señoráns.

En el CPI Alfonso VII estudian este curso 431 alumnos entre las tres etapas. La empresa Sala Gradían es la que se encarga del servicio de comedor.