El PP trata de recuperar la regulación de los «lombos» que el gobierno local desestima

Serxio Barral Álvarez
Serxio Barral PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

emilio moldes

Un informe concluye que cambiar la ordenanza en vigor no acarrearía costes aunque aplicarla con carácter retroactivo, sí

24 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El grupo municipal del PP insistirá en que se regulen los reductores de velocidad («lombos») que el Concello instala en los viales de su titularidad y que ahora se están llevando también al rural. El PP presentó en su día una moción instando a que los «lombos» se regulen según la normativa dictada por el Ministerio de Fomento, que establece una altura máxima que en muchos casos en Pontevedra se sobrepasa. La tesis que aplica el Concello para construir los reductores de velocidad es una directiva de accesibilidad -emitida en su día por Vivienda- que recomienda situar el «lombo» al nivel de la acera, de ahí que haya diferentes alturas.

A la vista de las discrepancias y de un informe técnico que valoraba en 1,9 millones de euros el coste de adaptar los reductores ya existentes, la junta de gobierno local decidió el pasado 12 de diciembre mostrar su disconformidad con la proposición normativa del PP. Lo que se difundió entonces era que la moción quedaba desestimada, igual que había sucedido meses antes con otra propuesta, esta del PSOE, para eliminar «lombos» de los accesos a los hospitales.

La resolución firmada en diciembre por la alcaldesa en funciones, Carme da Silva (BNG), especificaba que se remitía el expediente «a informe da Intervención». Ese informe del departamento económico se acaba de conocer, y dio pie al PP a retomar el asunto. Moreira afirmó que «Lores mintió cuando dijo que la junta de gobierno archivaba el asunto» y que la prueba de que el expediente sigue vivo es el informe de Intervención. Lo que no dijo el portavoz del PP es que fue el propio gobierno local el que pidió ese informe en aquella resolución de diciembre.

En cuanto al documento, Moreira hizo ayer una lectura parcial del mismo y se esforzó en asegurar que Intervención sostiene que la modificación de la ordenanza no implica gasto alguno. Efectivamente, así es, pero el informe también deja claro que sí habría gastos si se aplica la modificación de la normativa con carácter retroactivo. Es decir, si hay que adaptar los «lombos» ya existentes. «O expediente non xenera gastos -dice textualmente el documento-. Sobre os gastos que poidan derivarse da aplicación da ordenanza que se pretende modificar, serán tramitados a través dos correspondentes expedientes administrativos e será nese momento cando se informe sobre a existencia de consignación orzamentaria en cada caso». Es decir, que modificar la ordenanza no tiene coste, pero aplicar esa modificación, sí.

Por lo tanto, la situación está en el mismo punto que en diciembre. Aún falta otro informe, de Secretaría, sobre la tramitación de la moción del PP, que se llevó al pleno por urgencia.

Verducido, nuevo foco de protestas

Una multitudinaria asamblea vecinal celebrada esta semana en Verducido puso de manifiesto el rechazo al plan de la Diputación para instalar una veintena de «lombos» en los viales provinciales que cruzan la parroquia. Los vecinos discrepan de lo que consideran un excesivo número de reductores de velocidad, mientras desde la Diputación se sostiene que el plan de mejora de la seguridad vial cuenta con el aval de los técnicos. El vicepresidente provincial, César Mosquera (BNG), incluso apuntó que hay algunos viales de la parroquia en los que se celebran carreras. Esta afirmación le valió ayer un severo reproche del PSOE: «Se coñecía esa circunstancia e non fixo nada estamos ante unha grave irresponsabilidade que chega ata a complicidade».

Aunque a la asamblea vecinal fueron invitados los cinco grupos municipales, el BNG fue el único que no envió a ningún representante.