El IES Torrente Ballester organiza una feria bajo el sistema de trueque para alumnos, padres y docentes
14 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.El trueque como sistema para cambiar unos libros por libros. Es la filosofía de la primera Feria de Libros Usados que impulsa un instituto de Pontevedra, el IES Torrente Ballester. La iniciativa está organizada por el profesor de Lengua David Castro Iglesias, que en su primer año en el centro ha querido retomar una idea que se consolidó con grandes resultados en Marín. «Todos tenemos libros en casa que sabemos que no vamos a volver a leer y que están cogiendo polvo», señala el docente. Lo que propone la feria es cambiar esos ejemplares por otros. Pero no es solo cosa de alumnos, sino que el proyecto incluye a padres y profesores que se quieran sumar.
Davil Castro explica que se persigue un triple objetivo: fomentar el gusto por la lectura, promover el reciclaje y la reutilización, y paliar el esfuerzo económico de las familias sobre todo al inicio de cada curso. ¿Qué libros se pueden canjear? Cualquiera que esté en buen estado. Se aceptan libros infantiles, juveniles, de adultos, manuales de texto, enciclopedias, ficción... La Feria de Libros Usados se celebrará el próximo 21 de junio, de 12 a 14 horas en el vestíbulo del instituto. «Sabemos que no es la mejor hora para los padres, pero tenemos que hacerlo en horario lectivo», comenta el profesor de Lengua. De momento, el centro ya ha reunido más de 500 ejemplares para la feria. Quien aporta recibe un vale por volumen, que podrá cambiar por otro libro ese día. La recogida se mantiene abierta hasta el 20 de junio.
En el Torrente Ballester estudian más de seiscientos alumnos. ¿Los libros en papel interesan a los más jóvenes en la era de las nuevas tecnologías? David Castro lo tiene claro. «Es cierto que cuanto más jóvenes son más nativos tecnológicos, pero los de la ESO siguen leyendo en papel. Algunos tienen e-book, pero el libro digital no suplanta al papel», remacha.
La primera Feria de Libros Usados será como una «experiencia piloto» en este instituto. Pero el objetivo con el que nace es más ambicioso: sacarla a la calle con la participación de todos los centros de la ciudad que se quieran sumar. En Marín se consiguió con el liderazgo del IES Mestre Landín. Ahí queda el reto.