«Lombos» para frenar las carreras ilegales en el polígono de O Campiño

Serxio Barral Álvarez
Serxio Barral PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

CAPOTILLO

El Concello invertirá 197.000 euros en un proyecto de «seguranza viaria» en la zona

30 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Frenar las carreras ilegales que en algunas madrugadas han llegado a congregar a centenares de personas en el polígono empresarial de O Campiño. Ese es uno de los objetivos que persigue una inversión que rondará los 197.000 euros y que el Concello de Pontevedra licitará como «mellora da seguranza viaria e da accesibilidade».

El portavoz del gobierno local, Raimundo González Carballo (BNG), no ocultó ayer, al dar cuenta del inicio del expediente de contratación del proyecto, que una de sus consecuencias será «evitar eses ralis ilegais», si bien matizó que el objetivo principal es mejorar la seguridad vial y la accesibilidad.

El plan diseñado por el Concello de Pontevedra prevé la instalación de pasos de peatones sobreelevados -«lombos»- en la práctica totalidad de las calles del polígono y también en las zonas de estacionamiento, que es donde suelen congregarse los aficionados a los deportes del motor según han podido constatar en los últimos tiempos las fuerzas de seguridad. Concretamente, el portavoz municipal apuntó a que uno de los puntos más conflictivos es una de las zonas más amplias de aparcamiento, situada en uno de los extremos del polígono, cerca del cruce que va hacia A Fracha. Este sería uno de los lugares habituales de las «quedadas» en los fines de semana, como constatan las marcas de neumáticos en el suelo.

Además de instalar esos «lombos», el proyecto contemplará también la creación de itinerarios peatonales para comunicar las áreas de estacionamiento con el resto del polígono. Estos recorridos segregados de uso exclusivamente peatonal también servirán para forzar el calmado del tráfico e impedir esas actuaciones fuera de la legalidad. La idea, subrayó González Carballo, es «romper» con elementos físicos «os circuitos que utilizan os condutores para esas prácticas».

Una vez que el Concello de Pontevedra adjudique la obra, la empresa que se haga con el contrato tendrá un plazo máximo de tres meses para ejecutar el encargo.

Una práctica habitual desde hace años denunciada por los empresarios

Desde hace más de diez años se vienen registrando en O Campiño carreras ilegales o, cuando menos, prácticas de conducción temeraria. La actividad comenzó a perseguirse con fuerza en el año 2006, cuando en un fin de semana de agosto se llegaron a registrar concentraciones de cerca de 700 personas. En aquella ocasión se interpusieron 74 denuncias por conducción temeraria en una sola noche. El último episodio del que hay constancia fue a principios de este mismo año, cuando agentes del subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Pontevedra disolvieron a unas trescientas personas que se habían dado cita en O Campiño. Los participantes niegan que se trate de carreras ilegales, y limitan la actividad a derrapes, frenadas y otras acciones similares aprovechando las rotondas y los aparcamientos. Ni los concellos de Ponte Caldelas y Pontevedra ni los empresarios de O Campiño lo ven así, y denuncian que se trata de prácticas manifiestamente ilegales.