El equipo español que competirá en la vuelta al mundo se presentó en Sanxenxo en un acto al que acudió el rey Juan Carlos
08 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.«Siempre existe una pequeña posibilidad de que no ganemos, pero dejaremos el pabellón de España alto». Con esta declaración de intenciones, tirando de humor, Pedro Campos expresó ayer su confianza en que el Mapfre aspire a lo máximo en la Volvo Ocean Race que arranca el próximo 22 de octubre desde Alicante. El presidente del Real Club Náutico de Sanxenxo ejerció como anfitrión de la puesta de largo del equipo español que él dirige y que capitaneará Xabi Fernández, en un acto que sirvió para presentar a la tripulación y que contó con la presencia, entre otras autoridades, del rey emérito, Juan Carlos I, y de su hija, la infanta Elena.
Las altas expectativas con las que parte el Mapfre, en cualquier caso, no son infundadas. El equipo español ya dio muestras de su potencial en la conocida como Etapa Cero de la Volvo, formada por varias pruebas en aguas europeas en las que, entre otros logros, consiguió el récord del mundo en la vuelta a la isla de Wight y se llevó la victoria en la clasificación general. Y si a esto se suma el nivel de la tripulación, formada por regatistas de diferentes países que acumulan, en total, veintiuna vueltas al mundo, el objetivo se presenta como algo más que una posibilidad.
Para ello, el barco capitaneado por Xabi Fernández, que cuenta con la campeona olímpica Támara Echegoyen en sus filas, tendrá por delante 45.000 millas náuticas -unos 83.000 kilómetros- en la edición más larga de la historia de la Volvo. Y como novedad, volverá a atravesar el océano Antártico dentro de un recorrido que, tras salir de Alicante, hará escalas en Lisboa, Ciudad del Cabo, Melbourne, Hong Kong, Guangzhou, Auckland, Itajaí, Newport, Cardiff y Gotemburgo antes de llegar a La Haya en mayo del 2018.