Los afectados por la planta de gas de Santa Comba piden al alcalde su apoyo

emilio forján SANTA COMBA / LA VOZ

SANTIAGO

Medio centenar de vecinos se reunieron para solicitar un cambio de ubicación al regidor, que acudió al encuentro

22 abr 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

La polémica generada por la pretensión de Gas Natural de instalar una planta de gas licuado en una parcela del lugar de Mourelle, en Santa Comba, y que estaría próxima a viviendas residenciales, va a más. Más de medio centenar de afectados se reunieron ayer por la tarde en el local social de Montouto para mostrar su desacuerdo y pedir un cambio de ubicación. Compareció la abogada de los vecinos, además del alcalde, Antonio Landeira, y los portavoces del PSOE, José Antonio Ucha, y de Terra Galega, Javier Facal, invitados por unos afectados que lamentaron la postura del Concello de permitir su instalación, mientras que para el regidor la legalidad ampara hasta la fecha a Gas Natural, por lo que «o Concello non pode opoñerse a un acordo entre dous particulares».

Una instalación peligrosa

El temor a convivir con una instalación que tildan de peligrosa y contaminante, algo que negó el alcalde porque según la información de que dispone «dixéronse moitas burradas que non son certas», generó opiniones en contra de Landeira por no ponerse, dicen, «de lado dos veciños», dado que tras la reunión con Gas Natural les quedó claro que su postura «é máis ben receptiva, e nós non opoñémonos a que o gas veña a Santa Comba, pero non a calquera prezo», señaló una de las representantes vecinales.

El portavoz socialista desmintió que fuese cierto que el Concello no pueda hacer nada, llegándose a preguntar si una simple señal de prohibición de vehículos de tonelaje en el acceso a la parcela podría obligar al Concello a informar desfavorablemente, a lo que este dijo que sí.