Rosario Porto rechaza denunciar a Alfonso Basterra por malos tratos

Xurxo Melchor
Xurxo Melchor SANTIAGO DE COMPOSTELA

SANTIAGO

La madre de Asunta declaró ante el juez y a los psiquiatras que su exmarido le pegaba

24 abr 2014 . Actualizado a las 04:03 h.

Rosario Porto no se aclara en si sufrió o no maltrato por parte de su exmarido, Alfonso Basterra. En su primera declaración ante el juez que instruye el asesinato de su hija Asunta, por el que los padres están imputados y en prisión desde hace siete meses, dijo que sí, cabizbaja, a preguntas de su propio abogado defensor. Aquel 27 de septiembre del año pasado llegó incluso a añadir con voz lánguida que su psicóloga le había dicho que tenía «doble personalidad».

Sin embargo, en su segunda declaración ante el magistrado, el 28 de noviembre del 2013, lo negó. En aquella comparecencia ya no estaba el abogado con el que acudió por primera vez a los juzgados, que fue sustituido después por su actual letrado, el penalista coruñés José Luis Gutiérrez Aranguren.

Así habría quedado el asunto de los presuntos maltratos de no ser porque cuando se entrevistó con uno de los dos equipos de psiquiatras que la han analizado, Rosario Porto volvió a confesar ser una víctima de agresiones. A los forenses del Instituto de Medicina Legal de Galicia (Imelga) les dijo que en sus últimos cuatro años de convivencia con Basterra, su exmarido la agredió con una frecuencia de tres a cuatro veces por año.

Ante esta situación, el juez Vázquez Taín decidió librar testimonio al Juzgado de Violencia contra la Mujer de Santiago por si los hechos relatados por la madre de Asunta en su primera declaración judicial y en sus sesiones con los psiquiatras fuesen constitutivos de un delito de violencia machista.

Declaración desde Teixeiro

Como en cualquier otro caso, lo que hizo el juzgado fue ponerse en contacto con la presunta víctima, Rosario Porto, para solicitar su declaración y preguntarle si deseaba presentar una denuncia por malos tratos contra su exmarido. Esta comunicación se hizo por videoconferencia desde la prisión de Teixeiro, en la que están ingresados los padres de la niña y, una vez más, la madre de Asunta ha rectificado sus acusaciones, ya que ha rechazado denunciar a Alfonso Basterra.

Ante la actitud de Porto, al juzgado no le ha quedado más remedio que archivar el caso, como ayer confirmó el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG). La cuestión es que ahora no se pueden emprender medidas legales contra Basterra si su exmujer no quiere denunciar los presuntos malos tratos que ha relatado en su primera declaración judicial y en sus entrevistas con los psiquiatras.

Lo único que Alfonso Basterra ha admitido sobre este asunto es que cuando Rosario Porto se separó de él se produjeron momentos de mucha tensión y que eso le llevó incluso a tener que ir al psicólogo porque su actitud no era la correcta.

Correos «muy desagradables»

En esos momentos, Rosario Porto explicó al juez Vázquez Taín que su exmarido le enviaba correos electrónicos y mensajes «muy desagradables» y que se sentía acosada porque le vigilaba por la calle. También contó que en uno de sus arrebatos golpeó la puerta de un baño de su piso, que todavía está rota desde aquel día.

Cuando Taín le preguntó por estos hechos a Basterra la única vez que ha aceptado declarar ante el magistrado, el padre de Asunta primero lo negó, pero al percatarse de que su exmujer había hablado de los incidentes y de que el juez conocía el contenido de los correos electrónicos y de los mensajes, admitió que tras la separación había perdido los papeles y que fue por eso por lo que recurrió a una psicóloga para corregir su actitud.