Viaqua revisa los 647 kilómetros del alcantarillado y lo prepara para las lluvias
SANTIAGO
La red tiene 21.501 pozos de registro y 10.745 sumideros
27 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.La empresa que gestiona el servicio de aguas en Santiago, Viaqua, ha puesto en marcha el plan de mantenimiento y limpieza de imbornales -sumideros- en la ciudad con el fin de preparar la red de alcantarillado para el otoño y el invierno, meses en los que la mayor cantidad de lluvia hace necesario que el sistema esté en perfectas condiciones.
Las tareas de limpieza también se llevan a cabo durante el resto del año, aunque es en septiembre y octubre cuando se intensifican con este plan específico que implica la limpieza a fondo de las canalizaciones del alcantarillado y de la red de aguas pluviales.
El objetivo de estos trabajos preventivos, en los que participan operarios además de camiones y máquinas de limpieza, es asegurar que los elementos del sistema en la red de alcantarillado estén al máximo de su capacidad hidráulica para evacuar, sin que se presenten problemas, el agua de lluvia.
Los trabajos de limpieza se están acometiendo en horario nocturno en las zonas más céntricas y el Ensanche, de forma que no se entorpezca ni el tráfico rodado ni la actividad de la ciudad, que como es lógico es mucho más intensa en las horas diurnas.
Durante este año, la empresa Viaqua completará la limpieza de los 21.501 pozos de registro con que cuenta la red de alcantarillado de Santiago, que consta de un total de 647 kilómetros de longitud. También se habrá procedido a la limpieza de todos los imbornales -sumideros- que existen en la ciudad, que son nada menos que 10.745.
La empresa que gestiona el servicio de aguas y el saneamiento de Compostela destaca la importancia que tiene la colaboración ciudadana en el correcto mantenimiento de la red. En concreto, para evitar situaciones que son perniciosas como arrojar a las canalizaciones de pluviales productos contaminantes como la lejía, jabones o pintura. No en vano, de este modo estas sustancias terminan directamente en los cauces fluviales dado que no siempre pasan por la depuradora.