Los pésimos datos de atropellos con los que ha arrancado el 2017 en Santiago no han pasado desapercibidos en el Concello. No en vano, los 16 casos que se han registrado en lo que va de año (17 si se computa el caso de ayer) suponen un ritmo que duplica el normal y que sitúa a Compostela como la ciudad gallega con mayor índice de peatones arrollados por vehículos.
Por este motivo la concejalía de Tráfico, que dirige Xan Duro (Compostela Aberta), ha encargado a la Policía Local un informe sobre todos los pasos de peatones de la ciudad. El objetivo es poder determinar cómo podría mejorarse la seguridad en ellos y contribuir así a evitar atropellos.
A mayores, Raxoi ha dirigido sus esfuerzos a mejorar la señalización y la visibilidad de los pasos de cebra. Así, desde junio del año pasado y hasta la fecha se han pintado o repintado un total de 491 pasos de cebra y se han instalado 22 señales de peatón, otras 54 de límite de velocidad y seis con el símbolo de centro escolar.
En el apartado de balizamientos, se han colocado 193 reductores de velocidad de caucho y, en lo que respecta a la señalización vertical, se han instalado 950 placas y se han reparado otras 178. Finalmente, también se han suministrado otras sesenta de las cuadradas. Con estas acciones, el Concello espera poder revertir los malos datos de atropellos de enero y febrero ya que, de seguir a este ritmo, el 2017 se cerraría con unos cien casos, cuando en el 2016 hubo solo 45.