¿Un déjà vu?

SANTIAGO

23 jun 2017 . Actualizado a las 10:59 h.

No parece buena cosa que el alcalde tenga que salir a la palestra para asegurar que la licitación del nuevo contrato para los comedores escolares que dependen del Concello empezará este mes. Y no lo es porque no tranquiliza. No al menos en el caso de los comedores escolares, donde parece que estamos en un déjà vu. En nada, el calendario comenzará a apremiar. Y mientras se estrecha el margen temporal, en Raxoi se recupera el argumento con que pretendió justificar el desaguisado de la licitación del curso 2015/16. Con esos mimbres, o muy parecidos, ya sabemos lo que dio de sí la gestión para resolver la convocatoria de aquel contrato: dos intentos fallidos de adjudicación y un tercero por urgencia para que al final la concesión recayese, con un incremento del 25 % en costes, sobre la empresa que ya la tenía. La misma, además, que había declinado asumir el nuevo contrato en la primera convocatoria, cuando le tocaba por turno tras la renuncia de la primera clasificada. Y todo ello precisó cinco meses, prácticamente medio año jalonado de declaraciones sobre plazos máximos frustrados a la postre, hasta febrero del 2016. Semanas antes, el edil del ramo, Manuel Dios, garantizaba que habría nuevo contrato para el primer día escolar de enero. Por eso no tranquiliza ni que haya que empezar a precisar fechas ni que el Ayuntamiento y la Xunta enreden de nuevo con que falta conocer la subvención autonómica y con que Santiago es la única ciudad que tiene problemas con eso. Lo dicho, un déjà vu, aunque ahora al menos hay que confíar en que el pliego para licitar el servicio haya resuelto los problemas que habían dificultado aquella adjudicación.