Pika: «Fue una pena, lo teníamos en nuestra mano»

Ignacio Javier Calvo Ríos
NASO CALVO SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

Paco Rodríguez

El técnico del Bastavales destaca el apoyo de la afición en la final de la Copa do Sar

26 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Alberto Fernández, Pika, acabó muy enfadado el partido, pero no con sus jugadores, sino con la actuación de uno de los jueces de línea del partido que enfrentó a su equipo, el Bastavales, contra el Piloño en Santa Isabel, en la final de la edición número 50 de la Copa do Sar. «Faltaban tres o cuatro minutos para el final y se nos fue la Copa. No pudo ser. Fue una pena, porque lo teníamos prácticamente en nuestra mano», explica el entrenador del conjunto perdedor.

Pika recuerda que «en la segunda parte parecía más cerca el segundo gol del Bastavales que el empate del Piloño, pero el fútbol es así y no podemos quitarle méritos al rival». Pese a quedarse sin trofeo, el técnico rojillo entiende que su equipo firmó «una temporada para enmarcar. Ya lo sabíamos fuese cual fuese el resultado de la final. Para nosotros es un orgullo meter tanta gente en Santa Isabel. No hay nada que reprocharle a mis jugadores».

Sobre las razones por las que el Bastavales dejó escapar su ventaja en la final ante el Piloño, Pika subraya que «nos fallaron las piernas al final, pues llevamos once meses muy duros. Ya en los últimos partidos notábamos que no llegábamos bien al final, lo hacíamos sin mucha fuerza». También los errores defensivos fueron determinantes en el marcador final: «Los goles del Piloño llegaron por fallos defensivos, sobre todo el del empate. Todos estos fallos fueron provocados por la falta de frescura. Cuando estás así no llegas a los balones con la misma contundencia». Para Pika, el Piloño partía como favorito en la final de las Copa do Sar: «Es un equipo que militó en una categoría superior, en la que vamos a jugar nosotros la temporada que viene. Sabíamos que el rival era un equipo con mucha fortaleza física, con jugadores importantes en la creación».

La falta de banquillo se notó mucho en el Bastavales, que no hizo cambios en la prórroga: «Somos un equipo modesto y humilde. No vamos a quejarnos por eso. El Piloño ganó justamente y ya está. Nos vamos a quedar con el ambiente y con el numeroso público que vino a apoyarnos a Santa Isabel».