Desescalada comercial: «Hay un goteo de clientes, pero el que entra es para comprar»

Patricia Calveiro Iglesias
P. Calveiro SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

XOAN A. SOLER

La primera semana no trajo grandes beneficios, aunque ayudó a asentar un clima de confianza

18 may 2020 . Actualizado a las 20:41 h.

¿Cómo ha sido la primera semana de la desescalada comercial? Los empresarios de Compostela consideran que ha sido importante que se permitiera reabrir y, aunque por ahora no está implicando grandes beneficios -salvo excepciones-, sí ayudó a asentar un clima de confianza clave para incentivar el consumo.

La respuesta en el arranque de la fase 1 «está sorprendiendo para bien. Hay una previsión de pérdidas, pero también motivos de optimismo», dice el presidente de la asociación de comerciantes Santiago Centro. «Teníamos la sensación de que esto iba a ser un desastre, y no fue así. Hay unas ventas ordenadas y los comercios están cumpliendo los requisitos marcados por Sanidad, al igual que el público», confirman desde Comercio Punto Compostela.

«Esto va a ser un proceso lento. Hay que garantizar la seguridad e ir perdiendo el miedo, tanto entre los clientes como por parte de los propios comerciantes», destaca el gerente de Compostela Monumental. «Hay buena voluntad por parte del empresariado para generar riqueza y empleo; y confío en que a partir de julio haya un mayor movimiento que favorezca una actividad no al nivel de años anteriores, pero sí que compense abrir los negocios y recuperar a trabajadores de los ERTE», añade.

En general, destacan que por las mañanas se está funcionando mejor y los días de lluvia juegan en contra. Tras casi dos meses cerrados, son prudentes a la hora de hablar de una recuperación. «Es pronto para decirlo, pero va a tardar», indica el presidente de Punto Compostela. «Si lo hacemos bien hasta diciembre, se podría salvar la situación a partir del 2021 con el Xacobeo», sostienen desde el comercio del casco histórico. «Igual este año no nos hacemos de oro sino de bronce, pero es algo que tenemos aquí y no hay en el resto de España», apuntan los del Ensanche. Todos, eso sí, comparten el miedo a un rebrote.

Por el momento, el ambiente en las tiendas es «tranquilo», describen en The Cott, donde, de media, hubo entre 20 y 30 personas al día, por debajo de su actividad cotidiana. «Hay un goteo de clientes, pero es verdad que el que entra es para comprar. Suelen ser clientes habituales y se escucha mucho la frase de apoyar al comercio de proximidad», dice Almudena Franqueira, empleada de esta tienda de moda femenina.

xoan a. soler

BOUTIQUE MARGA CHAROL

«ESTOY SUPERORGULLOSA DE LA RESPUESTA DE MIS CLIENTAS»

Marga García, propietaria de la boutique de moda Marga Charol, fue de las que subió la reja ya en la fase 0 con cita previa, tras ponerse en contacto con su clientela habitual para informar de que reanudaba la actividad: «La verdad es que, sin aglomeraciones, la reacción fue muy buena. Todos los días se vendió algo y no hubo devoluciones, a pesar de que se cancelaron todos los eventos. Estoy superorgullosa de la respuesta de mis clientas». Reconoce que en el casco histórico hay poco movimiento estos días, pero «hay que intentarlo. No se puede ser catastrofista, si no a ver con qué ánimo abres... Mira si yo confío que ya levanté dos ERTE y nadie me aseguraba esta respuesta». Aunque la mayor parte de las caras que acudieron estos días eran conocidas, también hubo quien vio la tienda abierta y acabó comprando, comenta la dueña del negocio fundado en 1982. Considera que una regulación de las rebajas «sería una manera de salvar la campaña, porque necesitamos estar estimulados para consumir y un poco de apoyo al pequeño comercio».

xoan a. soler

JOYERÍA ÁMBOA Y MAELOC

«LA AFLUENCIA FUE ESCASA, EL PARÓN TURÍSTICO AFECTA»

La cadena de joyerías Ámboa y Maeloc, con tres tiendas en la zona monumental, abrió el lunes la de la Rúa Nova para tantear el terreno. «La afluencia fue escasa, de momento. Nos está afectando mucho el parón turístico en el casco histórico», cuenta Vicente Sande Lamas. Con una movilidad ínfima entre concellos, indica, solo entran en su negocio vecinos del entorno, y pocos. «Cuando hace buen tiempo se pasea más y nuestra venta es un poco impulsiva, pero hace falta que pasen por aquí», repara. Juega a su favor tener unos escaparates que se adentran hacia el local y dan continuidad al espacio exterior, porque ayudan a romper la barrera psicológica que supone entrar a un local. Explica Sande que entre las precauciones que se están tomando, las piezas que se prueben los clientes se desinfectan con alcohol de 70 grados y disponen también de una máquina de esterilización ultravioleta. «De cara al futuro inmediato hay cierta preocupación, mientras no tengamos una vacuna. Un rebrote sería un escenario mucho más catastrófico», subraya.

ZAPATERÍAS CATCHALOT

«SE VA ANIMANDO LA VENTA FÍSICA Y LA ‘ONLINE’ REPUNTÓ»

Santiago Carvajal, gerente de la zona norte de Catchalot, dirige siete tiendas, dos de ellas en Santiago. La del centro comercial As Cancelas no pudo abrir aún sus puertas, pero la de Doutor Teixeiro lo hizo esta semana. Explica que aún hay cierto desconcierto entre el público: «La gente todavía no sabe si estás abierto o no, salen con miedo, algunos ni salen de casa...». Con todo, asegura que «se va animando la venta física y en la online hubo un repunte desde Semana Santa». Por los datos que maneja, la caja estos días es de un 40 % respecto al año pasado. Carvajal lanza un mensaje de optimismo, consciente de que se avecina un año duro. «Tenemos una posición sólida en el sector y se va a seguir apostando por el negocio, con todas las garantías», apunta. Entre las siete tiendas a su cargo, se invirtieron más de 2.000 euros para adaptarse a los protocolos sanitarios. Ofrecen, además, un horario preferente para personas de más de 65 años de 10 a 11 horas, aunque «no está funcionando. Esa hora que tienen por las mañanas la aprovechan para pasear».

Sandra Alonso

CASH CONVERTERS

«LO QUE MÁS SALIDA TIENE SON LAS CONSOLAS Y LAS BICIS»

En contra de lo que se podría esperar, en las tiendas de segunda mano no hubo esta semana un aluvión de clientes dispuestos a deshacerse de objetos personales para conseguir efectivo. David Iglesias Rodríguez, gerente de Cash Converters en Santiago, afirma que «lo que más está habiendo son recuperaciones», por encima de compras o empeños. ¿Por qué muchos deciden ahora recuperar lo que en su día vendieron? «No sabemos. Puede que la gente tenga miedo a que cierren los negocios y quieren rescatar sus pertenencias», dice el empresario de A Laracha. ¿Y los micropréstamos? «Se habrán hecho dos o tres, lo que harías en un solo día por la mañana», responde. «A la tienda física no entran muchos clientes últimamente. Y lo que más salida tiene son las consolas, especialmente la Nintendo Switch y la PlayStation 4. Al tener la web funcionando, ya nos quedamos sin stock el mes pasado. También se invierte en telefonía y televisores, todo lo que tiene que ver con tecnología, y hay bastante demanda de bicis de segunda mano».