David Planas: «No podemos hablar del Camino con elementos de hace siglos, se ve distante»
SANTIAGO
Su proyecto de arte contemporáneo «Iacobus» se exhibe en Museo de la Catedral
21 ago 2023 . Actualizado a las 21:32 h.El protagonista. A David Planas le gusta pintar «desde que tengo uso de razón». En estos momentos, su obra llena de color se puede ver, además de en el Museo de la Catedral, en la galería Luisa Pita. Con esta galerista acudirá a una importante feria de arte en Miami a finales de año.
Nunca se calzó las zapatillas con la mochila al hombro para dirigirse a Santiago siguiendo las flechas amarillas de ninguna de sus rutas oficiales. Ni tiene en sus planes hacerlo: «Distorsionaría lo que para mí significa el Camino. Respeto mucho Galicia y lo que me ha dado». Pero el artista cubano David Planas (Güira de Melena, La Habana, 1976) se ganó el calificativo de peregrino hace más de dos décadas. Cuando en el 2000 llegó a la Costa da Morte después de salir de su tierra y pasar por varios países europeos, el sacerdote Javier Porro le animó a peregrinar. «Él fue el que me metió el gusanillo del Camino. Por mi situación, me dijo que lo hiciera. Pero yo le respondí: ‘Irmán, yo llevo haciendo el Camino de Santiago desde Cuba'», relata.
Sus palabras tuvieron contestación del párroco: «Es cierto, eres un peregrino». Ahí se encuentra el germen de Iacobus. La historia de un peregrino, la exposición que desde hace unas semanas recibe al visitante del Museo de la Catedral en el pazo de Xelmírez. Las piezas impactan por su colorido e invitación a interaccionar en un contexto con siglos de historia. «Quiero aglutinar a través de mi experiencia las historias de las demás personas», afirma.
Este diálogo del arte contemporáneo con el fenómeno jacobeo en la propia Catedral había tenido su primer capítulo el año pasado cuando por unos días la pieza Los 365 rostros del Apóstol Santiago de David Planas se exhibió junto al pórtico de la Gloria. Ahora esta pintura, que semeja un rompecabezas gigante en el que el artista combinó el rostro del apóstol con el suyo propio, forma parte de la quincena de piezas de la muestra que podrá verse hasta final de año en el museo. ¿Qué supone introducir el arte más contemporáneo junto a piezas centenarias en la Catedral? «En realidad, creo que todos los artistas, incluso el maestro Mateo, fueron transgresores cuando elaboraron su proyectos para la Catedral. No es que se pueda realizar nada extraordinario en este momento, pero estamos en el siglo XXI y no podemos elaborar las piezas que se hacían antes: tenemos otros recursos, otros materiales y otras visiones. Además, el Camino no es lo mismo que hace siglos, tampoco Santiago; entonces, es también una manera de reflejar que la sociedad va cambiando», detalla David Planas, que desde hace más de 15 años reside en Santiago.
Con estas obras —donde la pintura se da la mano con madera, escayola o hierro— el objetivo es ofrecer una visión contemporánea del apóstol Santiago y el fenómeno jacobeo. «No puedes hablar del Camino utilizando elementos culturales de hace siglos porque la gente sí lo miraría, pero lo vería distante. Entonces era importante traer la contemporaneidad a la idea del Camino, que para mí dejó de ser hace tiempo el peregrinaje que se realizaba inicialmente y es un momento para ti, para reflexionar», afirma David Planas.
Las piezas —donde el artista toma referentes como la máscara del peliqueiro, la línea amarilla jacobea, Fisterra o un antiguo rosetón de la Catedral que reprodujo a modo de timón de barco— son interactivas, permitiendo en algunos casos distintas visiones según la perspectiva. «El arte contemporáneo tiene que acercarse al espectador de una manera fácil y una de ellas es que las pueda tocar, intervenir, de eso modo las hace suyas», reflexiona. La idea es que esta exposición de la mano de la Fundación Catedral y del Museo catedralicio itinere por otros puntos.
Muestra en una galería
Pero en el pazo de Xelmírez no es en el único sitio que se puede ver ahora la obra de Planas en Santiago. En la galería Luisa Pita se exhibe hasta el 12 de septiembre Con colores y poemas viene el cimarrón, donde ofrece una visión más intimista. «Está la relación con mi hija, con la Cuba que está lejos...», detalla el artista cubano. Este mes es necesario pedir cita previa para visitarla.