¿Cuatro tutoras en tres semanas? Los padres del colegio de Fontiñas de Santiago critican la cascada de sustitutas que han sufrido sus hijos de cuatro años

Elisa Álvarez González
Elisa Álvarez SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

XOAN A. SOLER

Las familias han puesto una queja y lamentan los problemas de adaptación en el inicio de curso: «Cústalles máis entrar»

06 oct 2023 . Actualizado a las 14:39 h.

«Foi un cúmulo de mala sorte que se escapa do noso control». Las palabras del director el colegio de infantil y primaria de Fontiñas, Samuel Busto, anticipan la situación que vivieron los niños de quinto de infantil durante sus primeros días de clase. En tres semanas, los pequeños de cuatro años —aún descolocados y tratando de adaptarse a la vuelta al cole—, han tenido cuatro tutoras diferentes, lo que ha provocado el malestar de las familias.

El curso arrancó con la titular de la plaza. Tras una baja llegó la primera sustituta que previamente había solicitado una excedencia. La tercera docente tenía programada una intervención quirúrgica por lo que dejó el aula tras unos días y ahora los niños tienen a su cuarta profesora, que llegó el lunes, «e agardamos que quede», explica Ana, madre de uno de los niños afectados, que además es nuevo en el centro, «eu falara coa docente titular para facer un acompañamento na aula, ao ser novo no colexio, pero ao vir as substitutas todo quedou totalmente en suspenso». Los padres han puesto una queja y el ANPA también. Entienden que la Xunta debe respetar la lista de sustitutos en los llamamientos pero también insisten en que son niños muy pequeños, de cuatro años, y además con bajas que se sabían con antelación, como la operación programada, «entendemos que se sexa garantista cos docentes pero cos nenos o proceso non foi garantista, o fin último da educación, que é coidar dos nenos, é o que non está protexido», señala Ana.

El presidente del ANPA, Juan Vázquez, respeta el procedimiento para nombrar a sustitutos pero plantea la posibilidad de establecer excepciones cuando afecta a niños tan pequeños, «entendemos las listas de contratación pero quizás en infantil habría que darle una vuelta, en este caso ha sido un cúmulo de mala suerte pero no son situaciones infrecuentes, hay que defender los derechos de los profesores pero también los de los niños».

El problema, manifiestan los padres, es que los pequeños se han encontrando con caras nuevas casi cada día, porque a las cuatro docentes hay que sumar los profesores de guardia los días que la Xunta no pudo mandar sustituto, «aos nenos cústalles máis entrar porque ven unha cara nova cada día, o meu fillo dicía: ¡é que teño mil profes!», explica Ana. Al tratarse de pequeños de infantil la extrañeza de ver a diferentes personas provoca llantos, «y cuando empieza uno los demás van detrás», lamentan desde el ANPA, que también se queja del déficit de profesorado para alumnado con necesidades especiales en el centro.