Las obras de reparación deben subsanar carencias de la obra, su deterioro y los actos vandálicos
AMES
El Concello de Ames mantiene abiertos dos procesos distintos que afectan al cementerio municipal. Mientras los trámites administrativos para la prestación del servicio siguen su curso, también lo hacen las obras para permitir la apertura del cementerio municipal, un servicio que este municipio debe tener obligatoriamente porque su censo supera los 20.000 habitantes.
Los trabajos para permitir la puesta en funcionamiento del cementerio comenzaron hace más de un mes y, teniendo en cuenta que el período previsto en el contrato era de 90 días, las obras deberían estar listas a finales del mes de junio como muy tarde, ya que, según reconocen en el Concello, los trabajos evolucionan a buen ritmo.
El coste de la intervención, financiada con cargo a fondos provinciales del Plan de Aforro e Investimentos (PAI), asciende a 250.000 euros, un importe necesario paras subsanar las carencias más graves del cementerio.
El camposanto amiense fue construido con cargo a sendas contribuciones del Plan E, y con antelación también se acometieron trabajos menores con talleres de empleo para parados.
Al deterioro de las instalaciones, terminadas en el año 2009 y sin que en ningún momento estuviesen en funcionamiento, se añaden los daños por actos vandálicos. Pero el recinto también tiene deficiencias estructurales que motivaron que el Ayuntamiento de Ames reclamase por vía judicial a la constructora por un proyecto cuyo coste rondó los 1,7 millones de euros.