Treinta colectivos piden medidas contra la velutina y sus ataques a las colmenas

La Voz SANTIAGO / LA VOZ

ARZÚA

CEDIDA

Denunciaron en Arzúa que la avispa aumenta en el verano

06 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La 32.º Mostra Galega da Apicultura celebrada en Arzúa ha supuesto la puesta en marcha de una plataforma de lucha contra le velutina integrada por una treintena de organizaciones de diferentes sectores (apícola, agrario, ambiental, ayuntamientos y universidades), una de cuyas reivindicaciones fundamentales es que la administración competente en esta problemática asuma su responsabilidad en el control y erradicación de la velutina.

A fin de llamar la atención de la ciudadanía, la nueva plataforma ha decidido realizar la Marcha Stop Velutina, de carácter reivindicativo, que recorrerá en tren durante el mes de octubre la cornisa cantábrica atravesando las comunidades más afectadas por la tártago astática (la avispa velutina).

Uno de los objetivos en esta etapa es hallar los mecanismos de control necesarios para atajar el problema, y en las jornadas de Arzúa se ha presentado un sistema denominado arpa eléctrica, que elimina los tártagos que se acercan a las colmenas mediante una descarga eléctrica cuando los insectos atraviesan un sistema de hilos metálicos.

La invasión de las colmenas es un quebradero de cabeza para los integrantes del sector apícola, que se hace más patente con la llegada del verano, como ocurre ahora. En esta época es cuando se acrecienta el número de velutinas y es necesario reducir los ataques a las colmenas. La búsqueda de soluciones prácticas, como la mencionada, se enmarca en este anhelado objetivo de la plataforma. El arpa eléctrica estaría dotada con un sistema de alimentación autónomo, que se pude fabricar con un método casero.

Polinización

En la cita arzuana se debatió asimismo la necesidad de combatir los pesticidas como causantes de una gran parte de la mortandad de las abejas a nivel mundial, una realidad que fue expuesta por el responsable de la campaña Salvemos as abellas de Greenpeace, Luis Ferreirim. La importancia de los polinizadores es clave, ya que de ellos depende la polinización del 90 % de las plantas con flores, que suponen la producción de la tercera parte de la alimentación humana. Traducido a un valor económico a nivel mundial representa un monto de 265.000 millones de euros al año.

Pero esa polinización está en serio peligro. Los expertos aluden a varios informes que desvelan que el 40 % de los insectos están a un paso desaparecer del planeta, con los consiguientes efectos «gravísimos» que eso implicará.