La N-547 tiene puntos conflictivos en Boente, A Portela y Ribadiso
24 mar 2024 . Actualizado a las 05:05 h.¿Son suficientes las medidas de seguridad que se adoptaron en la carretera nacional N-547 para minimizar el riesgo de accidentes en tramos peligrosos como el que vertebra Arzúa? El fatal desenlace de un reciente atropello en el núcleo de A Portela, con un peatón fallecido, reavivó el debate sobre la siniestralidad de una vía con más tráfico pesado que nunca desde la apertura del tramo de la A-54 desde el municipio arzuano hasta Santiago. «Hai que seguir mellorando a seguridade», afirma el alcalde de Arzúa, Xoán Xesús Carril, al considerar que puntos como A Portela y Ribadiso «seguen sendo problemáticos», a pesar de la efectividad, tal y como reconoce, de los cambios que se realizaron en la señalización horizontal, como el recorte aplicado a los dobles carriles, y hasta la eliminación de uno de ellos en el caso de A Portela, donde, además, la velocidad está limitada a 50 kilómetros por hora y es habitual la presencia del radar de Tráfico.
Ese lugar, con viviendas habitadas a ambos márgenes de la carretera nacional, no es el único problemático. El último informe de la Fundación RACE sobre la red de carreteras del Estado identifica el tramo de la N-547 entre los puntos kilométricos 47,3 y 54,8 como uno de los siete considerados de riesgo en la comunidad gallega. En ese tramo que comparten Melide y Arzúa se registraron, entre los años 2020 y 2022, cuatro accidentes de tráfico, con un balance de dos fallecidos y cuatro heridos graves. La peligrosidad de la carretera nacional a su paso Arzúa, con otro punto conflictivo a la altura de Boente, la trasladó, hace un par de años, al Congreso el diputado del BNG Néstor Rego, según recuerda el alcalde arzuano, que ya solicitó formalmente medidas de seguridad para la travesía urbana, como el acondicionamiento de un nuevo paso de peatones, y la mejora de la señalización en el cruce de carreteras del centro urbano para aliviar las retenciones de tráfico que registra.