Aparecen restos de pavimento del nabal del antiguo convento de Melide

Natalia Rodríguez Noguerol
n. noguerol MELIDE / LA VOZ

MELIDE

CEDIDA

Es una estructura de piedra rústica de gran tamaño localizada en la rúa Galicia

29 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Los trabajos de canalización que ejecuta Unión Fenosa en Melide para ofrecer en la localidad su servicio de gas natural han sacado a luz una superficie pavimentada con piedra rústica de considerables dimensiones que desde el estudio contratado por la compañía para realizar el control arqueológico de las obras identifican, con las reservas propias de no tener la absoluta certeza, como restos del nabal del antiguo convento de Sancti Spiritus, hoy iglesia parroquial.

El hallazgo se localizó la semana pasada en la rúa Galicia, referencia en el casco urbano melidense porque en ella se encuentra la Casa de la Cultura y el viejo instituto de secundaria, reconvertido en centro multiusos. Y en la cercanía de sendos inmuebles se localizó esa estructura empedrada, visible, a una profundidad de más de 50 centímetros, en 14 metros de largo y 7 de ancho. De la pieza está identificado su límite sur, ubicado a la altura del número 10 de la calle, pero no así el otro extremo longitudinal, toda vez que la zanja de las obras de canalización se extiende, porque así está proyectado, hasta el número 6 de la rúa. Por eso se entiende que el tamaño de la de la superficie, también a lo ancho, es mucho mayor.

Desde el estudio de arqueología de Simón Pena Basso, el que contrató Fenosa para preservar la aparición de restos en una zona del casco urbano de Melide que forma parte del ámbito de protección del Camino de Santiago, Xurxo Broz Rodríguez, que junto con su compañera de profesión Inma Castro Paredes son los arqueólogos que están a pie de obra, explica que la estructura se correspondería con la pavimentación de una plaza o de un paso que utilizarían medios agrícolas como los carros para salvar la humedad propia de las tierras de labranza del antiguo convento melidense, fundado en 1372 y en activo hasta la desamortización de Mendizábal en 1835. Sin embargo, los restos que se hallaron son posteriores a la época medieval. Los arqueólogos los fechan en la moderna -siglos XVI o XVIII- y, de igual modo, consideran que la superficie estuvo en uso hasta principios o mediados del siglo pasado, toda vez que apareció cubierta de materiales como ladrillo y escombros.

El hallazgo supuso «unha gran sorpresa», reconoce Xurxo Broz, que lo considera «moi importante, porque non se contaba que nunha rúa da zona nova de Melide aparecesen restos arqueolóxicos». Por eso, el arqueólogo valora positivamente la actuación que para dotar de servicio de gas natural está ejecutando Fenosa, «unha obra civil que permite sacar á luz cousas que doutra forma non se verían». Lo que también se halló con las obras de canalización en la rúa Galicia fue la cimentación del muro que delimitaba el nabal del Convento. El propio cerco se tiró, sin consecuencias, hace unos 5 años cuando se acondicionaron las fincas anexas a la Casa de la Cultura para instalar las atracciones de feria en las fiestas grandes de Melide.

El hallazgo, descubierto con las canalizaciones de gas natural que ejecuta Fenosa, quedará protegido bajo tierra

 

 

La superficie pavimentada con piedra rústica que se halló en la rúa Galicia no quedará a la vista. Para descubrir toda su dimensión habría que levantar toda la calle y hasta probablemente la zona ajardinada del viejo instituto de secundaria de Melide. Con todo, la estructura quedará protegida bajo tierra con un aislante textil y una capa de arena. Ha sido lo recomendado por la Dirección Xeral de Patrimonio, desde la que, ya la semana pasada, trasladaron a la localidad a un arqueólogo para supervisar el hallazgo, toda vez que «ten bastante entidade», insiste Xurxo Broz.

Este arqueólogo del estudio contratado por Fenosa para el control de las obras de canalización indica que, aunque el descubrimiento de la superficie pavimentada fue una sorpresa, no se descarta «que poidan aparecer, visto o visto, máis restos de interese». Para empezar, en la siguiente calle donde está proyectado obrar: la Amador Rodríguez, paralela a la rúa Galicia.

Hace aproximadamente un mes y medio que los profesionales de la empresa de arqueología de Simón Pena Basso trabajan a pie de obra controlando la canalizaciones que para ofrecer gas natural ejecuta Unión Fenosa, que cuenta, al igual que el estudio, con el apoyo y asesoramiento documental del museo comarcal de Melide ante la aparición de restos de interés arqueológico. Ese trabajo de control in situ de la actuación se reforzará cuando la apertura de zanjas se acometa en calles consideradas más sensibles al hallazgo de vestigios patrimoniales por ser más cercanas o estar en pleno Camino de Santiago, que en Melide discurre en las variantes francesa y primitiva. En esos casos, además de la vigilancia a pie de obra, se realizarán catas previas por si se valorarse la necesidad, ante la aparición de restos arqueológicos, de modificar el trazado de las canalizaciones. Ese trabajo se realizará en las calles más céntricas del casco urbano melidense, como son la avenida de Lugo, la rúa Progreso, la ronda de A Coruña o la avenida de Toques.