Altri suspende las charlas sobre su proyecto en Lugo tras el rechazo de los vecinos de Palas de Rei, Monterroso y Melide
MELIDE
La multinacional atribuye la decisión a la «actitud agresiva en aumento de determinados colectivos»
21 mar 2024 . Actualizado a las 18:57 h.Altri ha decidido suspender las charlas que tenía programadas para dar a conocer a la ciudadanía su proyecto de fábrica de celulosa y fibras textiles en el municipio lucense de Palas de Rei después de que, esta mañana, técnicos de Greenfiber, la sociedad que lo desarrolla, se levantasen de la mesa informativa organizada en Melide. Entre gritos de «Altri non», procedentes del público asistente al acto, con pancartas en las que podía leerse igual mensaje, el personal de la empresa abandonó la charla, para comunicar, posteriormente, la suspensión de las previstas en la tarde de este jueves en Santiso, Agolada y Antas de Ulla.
En un comunicado, la multinacional lusa justifica la decisión en la «ausencia de condiciones básicas de respeto de parte de un sector del púbico asistente a la última charla informativa llevada a cabo por Greenfiber en Melide». Desde Altri aluden también al rechazo social con el que se encontraron en las convocatorias celebradas en Palas de Rei y en Monterroso para atribuir a una «actitud agresiva en aumento de determinados colectivos» la «imposibilidad» de dar continuidad a una ronda de encuentros, programados con el objetivo de, afirman, «informar a los vecinos».
Añade la empresa que explorará con los ayuntamientos «nuevas opciones para informar de manera personalizada a los vecinos», y anuncia que «distribuirá material explicativo del proyecto y habilitará próximamente una página web». Actualmente, añaden, dispone del correo electrónico información@greenfiber.es
Preguntas sin respuesta
Asistentes a la charla de los representantes de Altri en Melide, convocada para la una de la tarde, compartieron a través de sus perfiles en redes sociales lo sucedido. Cuentan que, tras escuchar a los técnicos de Greenfiber, el público empezó a trasladar preguntas, sin que muchas de ellas recibiesen respuesta. «Outras non as oían, e outras non podían ser feitas», hacen público estos vecinos, que vinculan el abandono del acto por parte de los ponentes al hecho de que «non tiñan por onde saír». El público reprocha a los técnicos de Greenfiber que suspendieran el acto «sen escoitar as preguntas da poboación e deixándonos coa palabra na boca».
El rechazo social a la fábrica de Altri en Palas de Rei, canalizado en la zona a través de la plataforma Ulloa Viva, ha ido en aumento en las últimas semanas, tras la publicación del proyecto en el Diario Oficial de Galicia, conjuntamente con la solicitud de autorización ambiental integrada, el estudio de impacto ambiental y la solicitud de declaración de utilidad pública. Una vez trascendió la documentación, la respuesta en contra de la ciudadanía se cierne en torno al hecho de que lo que se anunció como una fábrica de economía circular para la producción de biofibras textiles multiplicará por tres la producción de celulosa de eucalipto que realiza la papelera de Ence en la ría de Pontevedra. Así, la multinacional portuguesa prevé generar en la factoría de Palas de Rei 400.000 toneladas de pasta de celulosa al año, frente a 200.000 de liocel.
El elevado consumo de agua, cifrado en 46 millones de litros al día como máximo, así como de materia prima (1,2 millones de metros cúbicos de madera de eucalipto al año) son otras de las cifras en las que se apoya el descontento social con una planta, que ocupará una extensión diez veces mayor que la de Ence, a menos de 5 kilómetros de Melide.
La contaminación atmosférica, el impacto medioambiental en el río Ulla, adonde se verterá el agua depurada (lo suficientemente, según la empresa), la afección en una zona declarada Lugar de Interés Comunitario por la flora autóctona que conserva, y una repercusión negativa en el sector turístico ligado al Camino Francés son los temores de una población que pone en tela de juicio el número de empleos que creará en la zona la fábrica: 500 directos, y más de 2.000 indirectos, según Altri.