La Anpa del Camiño Inglés exige dos líneas para niños de 3 años

Margarita Mosteiro Miguel
marga mosteiro SANTIAGO / LA VOZ

OROSO

PACO RODRÍGUEZ

Sostiene que hay demanda y que el otro centro de Sigüeiro impide la conciliación familiar

27 mar 2017 . Actualizado a las 22:50 h.

La Anpa Carboeiro del colegio público Camiño Inglés de Sigüeiro (Oroso) reclama a la Consellería de Educación que habilite la segunda línea para niños de 3 años, en vista de la demanda de plazas para curso 2017-2018. El centro recibió 30 peticiones de plazas, pero solo dispone de un aula de 25 niños. Desde la Anpa recuerdan que hace dos años el colegio ya contó con dos aulas de 3 años, y que el pasado curso se redujo a una porque la matrícula era baja. De hecho, en el colegio hay espacios vacíos y un aula para la segunda línea de educación infantil (3 años) con todas las características necesarias para una escolarización en excelentes condiciones. La Anpa considera que la negativa de la Inspección de Educación es solo porque «no quieren mandar un docente más al centro nuevo».

La presidenta de la Anpa, Susana Meijome, explica que el otro colegio de Sigüeiro, más antiguo que el centro Camiño Inglés, cuenta dos líneas para 3 años y dispone de plazas vacantes, porque tendrá 15 niños por aula. Sin embargo, los padres de los niños de 3 años no aceptan esta opción, ya que el colegio antiguo tiene un horario que no se adapta a las necesidades de las familias y tampoco ofrece servicios básicos que aseguren la conciliación. Incluso, dice Meijome, la segunda opción en la solicitud de plazas no fue ese centro, sino otro en Santiago por dirección laboral.

Aunque la dirección de la Anpa no quiere abrir una guerra entre los dos colegios, Susana Meijome asegura que los alumnos del colegio antiguo, por cuestiones de transporte, entran a las 9.45 horas y salen a las 14.45, «lo que supone que niños de 3 años estén más allá de las tres de la tarde sin comer». En el colegio nuevo el horario es de 9.15 a 14.15 horas.

En cuanto al servicio básico de comedor, Meijome subraya que los niños que residen en Sigüeiro no podrán disponer del mismo en el colegio antiguo, mientras que en el nuevo no tendrán problemas para comer en el centro. Un servicio, el del comedor, que la Anpa considera indispensable.

La presidenta de la Anpa recuerda que el nuevo colegio se construyó para atender la creciente demanda de plazas, y se hizo una inversión de cinco millones de euros, por lo que «no tiene lógica que ahora lo tengan casi vacío». Meijome indica que el centro no solo dispone de aulas para acoger la segunda línea de 3 años, sino que cuenta con las instalaciones necesarias para mantener esa segunda línea en los cursos sucesivos.