Denuncian el robo de una moto de enduro en Santa Comba y el dueño pide ayuda para recuperarla

Amargo final para integrantes del club Trotamontes, de Pol (Lugo), que el sábado participaron en la segunda ruta Terras do Vákner en Dumbría. Tras completar la prueba, que contó con más de 200 participantes, hacían noche en un hotel de Santa Comba antes de regresar a casa. Y de madrugada se encontraron con que alguien había cortado las eslingas que amarraban al remolque dos de sus motos de enduro. Una de ellas estaba tirada en el suelo, pero habían robado la otra. Se trata de una Husqvarna TE 250 del año 2015, con placa 1071-JBS, con decoración en colores amarillo y negro y el dorsal 17 visible en frontal y laterales.

Su propietario, que presentó la correspondiente denuncia en el cuartel de la Guardia Civil de Santa Comba, solicita colaboración para dar con el paradero de la moto: «Saíra todo perfecto, xa só quedaba erguernos cedo e voltar á casa». Él se había quedado a descansar en el hotel, mientras otros compañeros salieron de fiesta por la capital xalleira. Y pasadas las 5 de la madrugada se encontraron con el remolque vacío, una moto tirada contra la acera y ni rastro de la otra. Así que lo llamaron para informarle del robo, que al principio pensó que era una broma. Pero no lo era, y lamenta la sustracción de la moto, porque aparte del valor económico están detrás todas las horas de dedicación a este deporte que ahora se ven truncadas.

Aficionados de Santa Comba señalan que en la última temporada están proliferando los robos de motos de monte en toda la zona. No solo de las que puedan quedar en la calle, como en este caso, «e que están entrando tamén en garaxes e levándoas», apuntan.

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