Las corporaciones del área de Santiago salientes dejan 6,27 millones más de deuda con las empresas de la que recibieron

s. lorenzo SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

PACO RODRÍGUEZ

El Concello de la capital acumula facturas sin liquidar por 8,33 millones, cuando hace cuatro años su debe sumaba 4,59

11 sep 2023 . Actualizado a las 20:58 h.

Las nuevas corporaciones que se conformarán el próximo sábado en Santiago y en los 24 municipios de su área de influencia deberán gestionar facturas pendientes de liquidar a las empresas con las que contratan por importe de 13,74 millones de euros. Esta deuda, que corresponde a datos cerrados a 31 de marzo y figura en el último balance que Hacienda difundió días antes de las municipales, supone casi 1,3 millones más que el importe que sumaban los 25 concellos por ese concepto hace un año.

Aunque la evolución de esa deuda resulta aún más significativa si se toman como referencia los datos a 31 de marzo del 2019, es decir, los últimos publicados antes de los comicios locales de aquel año. Porque las corporaciones salientes legan a las nuevas facturas pendientes por 6,27 millones más de la suma de la deuda que las primeras recibieron en el 2019 (7,46 millones). Es decir, esa carga ha aumentado un 84 % en el último cuatrienio.

Como es lógico, el grueso de ese debe corresponde al Concello de Santiago, que es también el responsable en mayor medida de la escalada de esa acumulación de facturas pendientes de liquidar en el área. De acuerdo con los últimos datos recabados por Hacienda, Raxoi adeuda a sus proveedores 8,33 millones. En Galicia, solo Vigo debe más (11,75 millones), con la evidencia de que triplica el censo de Santiago. La corporación saliente (PSOE) recibió hace cuatro años de la anterior (Compostela Aberta) facturas pendientes de pago por 4,59 millones. De este modo, durante el último mandato municipal el monto de esas facturas se ha incrementado en 3,74 millones, lo que equivale a un 81,4 %.

Radiografía del área

Aunque el gobierno de Xosé Sánchez Bugallo priorizó en su gestión el control de la deuda con las empresas en la primera mitad de su mandato, lo que le permitió reducirla a 2,71 millones en marzo del 2021, en los últimos dos años volvió a repuntar por encima de los 8 millones. Eso sí, lejos de los 13,52 millones que el Concello de Santiago había llegado a acumular al cierre del 2018 en impagos a sus proveedores.

En cuanto al resto de ayuntamientos del área, destaca el incremento de la deuda por ese concepto en Teo, que pasó de 373.052 euros en marzo del 2019 a 1,51 millones en el mismo mes de este 2023; y en Ames, de 358.608 a 1,24 millones. Pero porcentualmente es mucho mayor el incremento de la suma de las facturas pendientes de pago en Santa Comba, que pasa de 64.096 euros en marzo del 2019 a 903.124. Y sobre todo en concellos como A Baña (debe 479.669 euros) y Brión (157.893), que hace cuatro años tenían el contador de los impagos a cero. También hay ayuntamientos que han aligerado el importe de esa carga. Destacan los casos de Vedra (de 427.981 a 75.118), Boqueixón (de 297.478 a 0), Oroso (de 142.128 a 45.933), Trazo (de 240.766 a 678 euros) y Arzúa (de 166.488 a 6).

Por lo que respecta al tiempo medio empleado para realizar los pagos, la mayoría de los concellos del área cumplen con el plazo de 30 días establecido por la ley sobre morosidad. Las excepciones se localizan en Santiago, que liquida en 56 días de media, A Baña (90), Rois (70), Toques (70), Santiso (63), Negreira (57), Teo (53) y Santa Comba (44). Y los concellos que abonan con mayor celeridad las facturas a las empresas con las que contratan servicios son Touro (que lo hace de media en un día), Boqueixón (dos), Padrón (tres), O Pino (cuatro) y Boimorto (cinco).