El alcalde de Val do Dubra acusa a la oposición de bloquear el Concello

emma araújo SANTIAGO / LA VOZ

VAL DO DUBRA

Anova critica la actitud del Partido Popular contra las propuestas de la lista más votada

03 jul 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El alcalde de Val do Dubra, Antonio Negreira (Anova), que desbancó al Partido Popular en las pasadas elecciones municipales al conseguir cinco concejales frente a los tres del PP, dos de Terra Galega y un independiente, denunció públicamente el veto de las fuerzas de la oposición a su labor de gobierno después de que en el pleno del pasado 26 de junio quedasen sobre la mesa la práctica totalidad de las propuestas del nuevo gobierno.

Para Anova, este problema no afecta exclusivamente a Val do Dubra. Rafael Dopico, responsable de Organización de este partido, entiende que «ao PP non lle sentou nada ben a marea do cambio» y olvida «os seus discursos de respectar á lista máis votada» y permitir la gobernabilidad.

«O resultado en Val do Dubra foi incontestable», insistía ayer Dopico en una comparecencia con el regidor dubrés, Antonio Negreira, y la primera teniente de alcalde, Celsa Oreiro. La número dos del nuevo ejecutivo señaló que desde las elecciones municipales habían mantenido contactos con las demás fuerzas políticas para plantear su modelo de organización, analizándolo formalmente en una comisión de portavoces a la que no acudió el PP. Y en esta reunión no hubo peticiones de información alguna. Fue en el pleno del pasado viernes en el que quedó patente, según Oreiro, la escasa disposición al diálogo y al consenso, especialmente con el PP, partido al que acusó de intentar boicotear el debate con una actitud que consideró de clara «obstrucción» al cuestionar incluso los asuntos que no debían someterse a votación.

Por su parte, el regidor dubrés resaltó que su propuesta de gobierno incluía una sola dedicación exclusiva, la suya, y con el mismo salario que cobra como docente por un montante de 39.600 euros brutos al año. También destacó que ningún grupo de la oposición mostró interés en formar parte del gobierno. Sus críticas se centraron especialmente en el PP. Negreira recordó que el exalcalde contó con un permiso del Sergas para acudir al Concello dos días a la semana y que de forma paralela había una edila con dedicación parcial. El actual alcalde se remontó a la etapa del anterior regidor, Baleato Iglesias, que cobraba 46.000 euros brutos , una retribución aprobada en sucesivos mandatos por el actual portavoz del PP.

Negreira anunció que buscará nuevos acuerdos, especialmente con Terra Galega, insistió en que gobernará con las herramientas que establezca la corporación e instó a los demás partidos a que les dejen gobernar o bien promuevan una moción de censura. La apuesta de acercamiento a Terra Galega se basa en que, según Negreira, fue el partido con mayor predisposición al diálogo e insistió en que su objetivo es pensar «nas necesidades do Concello de Val do Dubra e non nas dos concelleiros».