Para caña, caña, con la que riegan la anguila los de Valga

SOCIEDAD

La celebración estrenó su distinción de interés turístico

31 ago 2014 . Actualizado a las 16:04 h.

Reunir en un mismo cartel las palabras fiesta y caña en plena canícula es sinónimo de éxito garantizado. Claro que siempre conviene leer bien el prospecto, porque cuando se trata de Galicia hay cañas y cañas. Y no, no hablamos de diferenciar entre las miles de variedades que de la noche a la mañana han copado las cartas de bares y pubs a los que ahora uno parece obligado a acudir con un máster en bebidas espirituosas bajo el brazo. Hablamos de sentarse frente a frente y aguantarle la mirada a esa otra caña, la que cambia el efecto refrigerante por la imparable acción tuneladora en su pausado descenso desde la boca hasta el peaje estomacal.

Festa da Anguía e Mostra da Caña do País. Así se las gastaban ayer en Valga. Bajo un sol de justicia, la propuesta parecía una provocación para el más pintado. Una idea que cobraba fuerza al ver junto a la carpa de degustación la concentración motera a cargo del club local, que este año se repartió el trabajo de organizar la fiesta con el propio Concello. Que el programa incluyese darle de nuevo para el pelo a los franceses 205 años después de la Batalla de Casal do Eirigo resultaba el argumento definitivo. Para caña, caña, la que dan en Valga.

Y sin embargo, nada más lejos de la realidad. Basta conocer al paisanaje para saber que lo suyo no va ni de retar al personal, ni de espantar a la gente. Su rollo es de película de Frank Capra. El de un pueblo que muestra sus virtudes sin fuegos artificiales, sino sacando a todas sus muchas y activas asociaciones culturales y sociales a su parque para presentarse al visitante entre palilleiras, con una anguila en el plato pescada por sus vecinos de Cesures, y una caña do país de las mejores del mundo. Como la que hizo Antonio Santiago, Tucho, que con 42 años de experiencia entre pecho y espalda confirmaba eso de que «para unha boa caña, mal viño».

Eso sí, con el bagazo bien limpio de impurezas. Un arte que pudo ingerir el conselleiro de Cultura, Xesús Vázquez, en el estreno de la condición de Festa de Interese Turístico de Galicia. Caña y anguila. Valga sí es different.