Mañana, tras el paso de un frente activo, las temperaturas descenderán de manera notable
21 feb 2024 . Actualizado a las 11:23 h.En 48 horas, la situación meteorológica en Galicia habrá completado su giro copernicano. Tras unas jornadas secas y temperaturas altas para la época del año, a partir de mañana se espera un temporal invernal en el que no faltará de nada: viento, lluvia, frío, nieve y oleaje. Ayer las temperaturas máximas ascendieron hasta los 23,3 en Porriño, 22,7 grados en Pontevedra, 22,5 en A Coruña y 22,3 en Vigo.
El responsable del cambio de tiempo es un corredor polar que crean el anticiclón sobre el Atlántico y una borrasca situada en Islandia. A través del pasillo de isobaras se desliza aire marítimo que llega desde Groenlandia a la comunidad gallega. Esa masa gélida y húmeda de origen polar será fuente de inestabilidad y provocará un descenso muy significativo de las temperaturas.
Mañana, el día arrancará con la visita de un frente activo. Las precipitaciones serán más intensas en las provincias atlánticas. Por la tarde, se espera la irrupción del aire gélido que viene detrás del frente. Será entonces cuando la lluvia persistente será sustituida por una de tipo chaparrón.
Además, esos chubascos caerán en forma de nieve por encima de los 800 metros por la tarde. La cota descenderá hasta los 600 metros al final de la jornada. Las temperaturas descenderán hasta siete grados respecto a los valores de hoy.
Las agencias meteorológicas ya han activado algunos avisos. La delegación gallega de la Aemet ha decretado uno por vientos superiores a los 80 kilómetros por hora en el norte de A Coruña y Lugo y también un aviso naranja en la costa por una situación de mar combinada del noroeste que provocará olas de cinco a siete metros. Por su parte, MeteoGalicia también avisa de que los vientos soplarán fuertes en las zonas altas.
El viernes también se espera un día muy inestable. Los chaparrones serán generalizados y puntualmente caerán acompañados de granizo y aparato eléctrico. La nieve caerá durante todo el día entre los 700 y los 800 metros. En cualquier caso, no se descarta que pueda nevar por debajo de esa cota.
Las temperaturas seguirán cayendo en picado. Entre hoy el viernes, las máximas descenderán hasta diez grados. El viento del noroeste se encargará de intensificar la sensación de frío. El sábado será otro día de chaparrones y nieve en las montañas de Lugo y Ourense.
El domingo irrumpe una nueva borrasca. El frente dejará precipitaciones intensas en toda la comunidad. El lunes está previsto que se sitúe sobre la Bretaña francesa. El viento soplará otra vez del norte y llegará más aire polar que propiciará nuevas nevadas.